Hoy, siguiendo con las fiestas que nos da el tiempo de Navidad, tenemos la fiesta de los Reyes Magos. Ayer en muchos pueblos de Ibiza y Formentera, y en otros hoy, está el bonito desfile de los Reyes Magos, que llevando los juguetes y los premios a los niños y niñas, en todos los pueblos de nuestras Islas menos en uno que eso lo ignoran y no tienen así auténticos Reyes Magos, hacen lo mismo que hicieron entonces como nos cuenta el Evangelio: Ir a adorar al Niño Jesús. Que fueron a adoran. En esos pueblos que lo hacen indican con ello la capacidad de sus responsables de esa actividad, Yo cada año asisto a alguno de los pueblos de Ibiza o de Formentera y con ello disfruto de esa buena actividad bien preparada por los responsables capaces.
Los Reyes Magos eran personas listas que estaban comprometidos en buscar la verdad, impregnando así su vida. No eran judos, ni romanos ni griegos, sino del Oriente. Encontrándose en el camino, se unieron en esa actividad.
La tradición dice que los Reyes Magos son tres: Melchor, Gaspar y Baltasar, que cada año el llamado Día de Reyes, traen los regalos a los mayores y muy especialmente a los niños. El Papa San León estableció que eran tres los Reyes Magos que fueron a adorar al niño Jesús guiados por una estrella: Melchor, Gaspar y Baltasar, y que los regalos que llevaban eran oro, incienso y mirra, significando: Rey y Dios Hombre. La historia narrada en el Evangelio de San Mateo, nos cuenta que los magos vinieron de Oriente guiándose por una estrella, la cual los condujo hasta Belén.
Antes de llegar, visitaron al rey Herodes el Grande en la ciudad de Jerusalén, a quien interrogaron por el nacimiento del que llamaban «Rey de los Judíos». El monarca, después de consultar a los escribas versados en la Biblia, les aseguró que el niño debía nacer en la pequeña ciudad de Belén, como establecía la profecía de Miqueas. Agregó, astutamente que, de regreso, hablaran con él para darle noticia del sitio exacto donde se encontraba dicho niño; y, así, poder ir él también a adorarle. En realidad, según el relato bíblico, su intención era darle muerte.
En Belén, los magos volvieron a ver la estrella, hallaron a Jesús recién nacido y lo adoraron; ofreciéndole oro (representando su naturaleza real, como presente conferido a los reyes), incienso (que representa su naturaleza divina, empleado en el culto) y mirra (un compuesto embalsamador para los muertos, representando el sufrimiento y muerte futura de Jesús). Parece ser que por el hecho de traer tres dones, se dio por sentado que eran tres los personajes que los traían. Aunque también en algún momento las distintas tradiciones han señalado que eran cuatro, siete y hasta doce magos.
Al regreso, advertidos los magos por un sueño de las intenciones del rey, no volvieron a Jerusalén. Herodes, entonces, ordenó dar muerte a todos los niños menores de dos años residentes en Belén, episodio conocido como la matanza de los inocentes. Un nuevo mensaje celestial, advirtió a José de la amenaza y éste, llevando a María y a Jesús, se fue hasta Egipto.
Loa fiesta de los Reyes magos, con sus actos, nos dejan unas buenas enseñanzas: Que como ellos hemos de buscar siempre a Dios; que Dios se entrega y ayuda a todos los pueblos, que todos los pueblos así acogiendo el Evangelio pueden ser buenos hijos y siervos de Dios; que si hay que hacer sacrificios se hacen y eso os hace bien; y tuvieron fe en Dios lo adoraron y le entregaron cosas. Nos enseñan con eso de están atentos de los signos que nos da Dios para conocerlo.
Encontrándonos con Dios, pues, se nos da la fe, la esperanza, el amor a Dios y la caridad con todas las personas. Estos Reyes Magos cambiaron su vida encontrándose con Jesús: acudiendo a Jesús pues tenemos un camino nuevo y mejor en la vida de la tierra.
Buena fiesta de Reyes Magos y que disfrutando de ello, acojamos, pues, sus enseñanzas para nuestra vida cristiana.
Sin comentarios
Para comentar es necesario estar registrado en Periódico de Ibiza y Formentera
De momento no hay comentarios.