Benedicto XVI, saludando a una enfervorizada multitud a su llegada a Valencia. Foto: REUTERS

AGENCIAS-VALENCIA
Benedicto XVI «reafirmó» ayer la «vigencia» de la familia basada en el matrimonio entre un hombre y una mujer, la única -dijo- que es capaz de contrarrestar el hedonismo. El Papa Ratzinger, en la misma línea que su antecesor, Juan Pablo II, pidió a los gobernantes y legisladores que tengan en cuenta a la hora de hacer leyes «el bienestar de los hogares en paz y armonía», que identificó con la familia basada en el matrimonio entre un hombre y una mujer y que da seguridad al hombre.

Benedicto XVI, que desde el comienzo de su Pontificado hace 15 meses, ha salido en defensa de la familia -a la que considera «asediada» por «nuevas formas» que identifica en el matrimonio entre personas del mismo sexo o parejas de hecho- proclamó en su primer día de visita a Valencia que la familia es una «institución insustituible según los planes de Dios». Benedicto XVI añadió que hay que vivir con sentido de responsabilidad y alegría» la familia y que promover los valores del matrimonio no impiden «gustar plenamente la felicidad que el hombre y la mujer encuentran en su amor mutuo».

Según el Papa teólogo, la fe y la ética cristiana no pretenden ahogar el amor, sino hacerlo más sano, fuerte y libre. El Papa y el presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, abordaron durante el encuentro mantenido ayer por espacio de 40 minutos en el Palacio Arzobispal de Valencia temas relacionados con la familia, la paz y la inmigración, según informaron fuentes gubernamentales. Toda la conversación se desarrolló en un ambiente «distendido» y «sin reproches», señalaron las fuentes.