Cargos políticos de las Pitiusas, así como los presidentes de los Consells de Ibiza y Formentera, han mostrado su preocupación por la actual crisis migratoria después de que decenas de personas hayan llegado a la costa pitiusa en las últimas horas y meses. Uno de los más contundentes a la hora de manifestarse sobre esta crisis migratoria fue el senador autonómico Miguel Jerez, quien dijo que el Gobierno de España «tiene desatendido el litoral, las fronteras y a los pocos efectivos policiales que tienen que hay para dar respuesta a esta avalancha». Destacó el hecho de que la llegada de una embarcación dejase desguarnecidos tres puestos de la Guardia Civil en tres municipios. A él se suma el presidente Vicent Marí, quien estalló este jueves en la conferencia de presidentes contra el Gobierno de Pedro Sánchez por su dejadez a la hora de aportar soluciones ante la avalancha de pateras. «Estamos desbordados; el Gobierno no puede ponerse de espaldas», afirmó con razón Vicent Marí, pues es el Gobierno central quien tiene las competencias en migración. En esta misma línea se manifestó la presidenta del Govern, Marga Prohens, quien avisó de que Baleares «ya ha llegado a su límite», pues el sistema de acogida de menores no acompañados atiende a ocho veces más de lo que prevé este servicio específico de plazas. «La inacción del Gobierno repercute directamente en los servicios públicos de Baleares», advirtió la presidenta Prohens.

Más críticas.

Pero no sólo políticos del PP critican la política migratoria del Gobierno de Sánchez. También lo ha hecho abiertamente el senador pitiuso Juanjo Ferrer, quien ha denunciado la falta de recursos para ayudar a los migrantes y evitar que aumenten las víctimas de las mafias que trafican con las personas que llegan con las pateras. Es preciso recordar que Ferrer formó parte de la candidatura conjunta apoyada por el PSOE. En cambio, los socialistas intentan defender la gestión del Gobierno de Sánchez y apuntan que el problema es la aprobación de la Ley de Extranjería, que prevé un sistema ordenado y regulado de los menores no acompañados, alegan desde el PSOE.

Excusas.

Nadie puede cuestionar que el problema de las pateras se ha desbordado en los últimos meses y la gestión por parte del Gobierno central deja mucho que desear, a pesar de tener la competencia en materia migratoria. Tampoco se puede cuestionar que los consells no tienen apenas medios para acoger a esta avalancha de menores mientras las labores de prevención para que sigan llegando pateras son prácticamente nulas e inexistentes. El problema no es que «el PP asuma el discurso antiderechos humanos y abiertamente xenófobos y racista de la ultraderecha», como dice errónamente la socialista Milena Herrera para intentar proteger sin sentido al Gobierno de Pedro Sánchez. El problema que la diputada Herrera, que representa a todos los ciudadanos de Ibiza y no solo a quienes votaron al PSOE tal y como le recordó este jueves el presidente Vicent Marí, no quiere ver por cuestiones partidistas es que las autonomías y los consells no tienen capacidad para afrontar esta avalancha de pateras mientras el Gobierno busca excusas para no ejercer como corresponde sus competencias. Y mientras siguen discutiendo, la avalancha de llegadas de pateras a Ibiza y Formentera es cada vez mayor.