El cable coaxial y la fibra óptica son las dos modalidades de conexión a internet más comunes en la actualidad, y antes de definir cuál es mejor, es necesario comprender cómo funcionan.
La conexión por cable es la que podríamos llamar la modalidad tradicional: la conexión entre el proveedor y el enrutador se establece a través de un cable con núcleo de cobre, por el cual viaja la señal, en forma de pulsos eléctricos.
La conexión por fibra óptica funciona de manera similar, pero el núcleo de los cables está formado, por lo general, de filamentos de vidrio muy finos, a través de los cuales la señal viaja en forma de pulsos lumínicos.
Habiendo comprendido esta diferencia clave, indagaremos, ahora sí, en la pregunta de cuál tipo de conexión es mejor.
La seguridad en la conexión
En términos de seguridad, la conexión por fibra óptica se considera por lo general más segura, por el simple hecho de que la señal viaja a través de pulsos lumínicos, mucho menos susceptibles de sufrir interferencias electromagnéticas que puedan interceptar la señal. Para proteger su conexión a Internet, debe cambiar su contraseña de Wi-Fi desde la página de administración del enrutador en 192.168.1.1 para D-Link y 192.168.0.1 para enrutadores TP-Link. La dirección IP está impresa en la parte posterior de su módem.
La velocidad de conexión
La velocidad de conexión es uno de los aspectos más importantes para la mayoría de los usuarios de internet. En este sentido, la conexión por fibra óptica es más rápida que la conexión por cable. La razón, una vez más, se encuentra en la manera en que la señal viaja a través de cada modalidad: la luz (fibra óptica) se transmite mucho más rápido que la electricidad (cable coaxial), y por lo tanto la fibra óptica ofrece mayor velocidad.
La estabilidad de la conexión
Por lo general, la conexión por fibra óptica es más estable que la conexión por cable. No solo porque al tratarse de pulsos lumínicos la señal es menos susceptible de sufrir interferencias electromagnéticas, sino también porque la fibra óptica tiene menor diámetro, lo que ayuda a reducir la resistencia a la señal. Dicho esto, la fibra óptica es sumamente sensible, por lo que su fiabilidad también está determinada por la calidad de su infraestructura.
El costo de instalación
Enlazado al punto anterior, el mayor inconveniente que enfrenta la conexión por fibra óptica hoy en día es la falta de infraestructura. El costo de instalación de una conexión de fibra óptica, siempre dependiendo del lugar y de los proveedores disponibles, suele ser considerablemente mayor al de una conexión por cable.
Sin embargo, esto es normal y sucede cada vez que una nueva tecnología emerge (algo similar a lo que sucede con el 5G). Con el tiempo, la expansión de la infraestructura necesaria para prestar el servicio de conexión por fibra óptica hará que este tipo de conexión sea más accesible y estable, mientras mantiene y, probablemente, impulsa aún más sus ventajas respecto a la conexión por cable en cuanto a seguridad y velocidad.
