Julian Assange. | Peter Nicholls

La Fiscalía sueca anunció este viernes el cierre de la investigación preliminar abierta en 2010 contra el fundador de WikiLeaks, Julian Assange, por un supuesto delito de violación, lo que supone el levantamiento de la orden de arresto internacional contra el periodista australiano.

El proceso abierto en Suecia llevó a Assange a refugiarse hace cinco años en la Embajada de Ecuador en Londres para evitar ser extraditado al país nórdico y, desde allí, a Estados Unidos por las filtraciones de WikiLeaks.

«La fiscal jefe Marianne Ny ha decidido hoy cerrar la investigación a Julian Assange en relación con la supuesta violación (grado menor)», informó en un breve comunicado la Fiscalía, que facilitará más detalles en una rueda de prensa anunciada para las 12 hora local (10 horas GMT).

La defensa de Assange había presentado hace dos semanas ante un juzgado de Estocolmo una nueva petición para que le fuera levantada la orden de arresto, apelando a declaraciones del Departamento de Justicia de EE.UU. sobre la posibilidad de presentar cargos contra él por su rol en el supuesto robo de información clasificada.

La Fiscalía debía pronunciarse sobre esa petición, además de informar de la investigación, dos meses después de haber finalizado la traducción del interrogatorio realizado en noviembre por el fiscal ecuatoriano Wilson Toainga a Assange.

Temor

Assange, recluido en la Embajada de Ecuador en Londres desde hace casi cinco años, siempre se ha negado a entregarse a Suecia porque teme ser enviado luego a Estados Unidos para afrontar un juicio militar por la información difundida en WikiLeaks.

«Considerando que todas las posibilidades de hacer avanzar la investigación están agotadas, no parece proporcional -en base al criterio del Tribunal Supremo- mantener la decisión de arresto contra Assange ni la orden internacional», señaló Ny en el escrito presentado ante el juzgado, reproducido por varios medios suecos.

La defensa de Assange había pedido en dos ocasiones cerrar el caso: en junio de 2014, apelando a la paralización del proceso; y en febrero del año pasado, después de que un grupo de trabajo de la ONU concluyera que la detención del periodista era arbitraria.

En ambos casos el tribunal rechazó la petición argumentando que Assange seguía siendo sospechoso y que se mantenía el riesgo de que quisiera evitar un juicio o una hipotética pena.

Assange fue interrogado en Londres sobre un listado de preguntas elaborado por Estocolmo y en presencia de dos funcionarias suecas, siguiendo un acuerdo alcanzado meses antes entre Ecuador y Suecia.

En el interrogatorio, según la declaración divulgada por él mismo, reiteró su inocencia por el delito sexual que se le atribuía y denunció lo «abusivo» del caso, que abarcaba cuatro delitos sexuales, reducidos a uno después de que tres prescribieron.

Ese delito de violación «en grado menor» a una joven mientras dormía continuaba vigente hasta 2020.

Assange fue detenido por la policía británica en diciembre de 2010, y a partir de ahí comenzó un proceso judicial que culminó en junio de 2012, cuando el Supremo reafirmó la extradición a Suecia y el periodista se refugió en la legación ecuatoriana.