Fundada en Alaior en 1973 por Antonio Mercadal Olives y a punto de cumplir los cincuenta años de trayectoria, Verd Neix SL es una empresa que ha sabido crecer y adaptarse a las necesidades del mercado, creando su propio taller de madera, aluminio y PVC. Su alta capacidad de producción basada en una constante organización les ha permitido llevar a cabo trabajos en todas las Balears así como fuera del archipiélago. Los hermanos Emilio y Virginia Mercadal Moreno lideran la segunda generación de este negocio familiar, dando trabajo a un promedio de 35 personas durante todo el año y llegándose a duplicar en algunos periodos según la demanda.
En el año 2020 consiguieron una producción de 4,2 millones de euros y todo indica que la dinámica de este ejercicio será algo mejor.
ORÍGENES. El origen de Verd Neix está íntimamente ligado a la trayectoria de Antonio Mercadal, un empresario discreto y hecho a sí mismo que empezó trabajando como ayudante en un taller de carpintería de Alaior para aprender el oficio. Posteriormente fue formándose en distintas carpinterías hasta que decidió emprender por cuenta propia. Tras los primeros pasos en solitario, a mediados de los años 70, adquirió un solar en el polígono industrial de Alaior, La Trotxa, donde acabaría construyendo una de las primeras naves que hoy sigue siendo la sede de la empresa. El boom turístico que empezaba a experimentar Menorca con la construcción de los primeros apartamentos y chalets, donde todos los cerramientos eran en madera, propició que el negocio fuera prosperando año tras año. “Mi padre se especializó en muebles de cocina y baño, mecanizando muchos de los procesos”, explica Emilio Mercadal Moreno, actual gerente de Verd Neix desde la jubilación de su padre.
La empresa se fue consolidando gracias a la realización de obras no solo para particulares sino también de diversa envergadura como hoteles y obras públicas, como sucedió con la primera ampliación del aeropuerto de Menorca, en la que fabricaron e instalaron toda la carpintería de madera.
Sin embargo, la crisis económica de 1993 supuso un parón que afectó a la actividad constructiva de Menorca y también a Verd Neix, por lo que Antonio Mercadal decidió trasladarse hasta Mallorca en busca de oportunidades para poder seguir manteniendo la plantilla. “Allí alquiló una nave y durante cinco años pudo dar continuidad al negocio de carpintería, participando en la construcción de distintos proyectos hoteleros que estaban en marcha, y dejando parte de la plantilla en Menorca para atender la poca demanda que había en aquel momento”, explica su hijo Emilio que se incorporó en el negocio en 1995. Su hermana Virginia entraría unos años más tarde.
EVOLUCIÓN. A su regreso, en 1998, atentos a la evolución del mercado y en un momento de pleno desarrollo turístico para Menorca en el que la carpintería estaba sustituyendo la madera por otros materiales de menos mantenimiento que los tradicionales, propició que en el año 2002 incorporara también en su plan de trabajo el aluminio y el PVC. Aquel año habían participado en la construcción de la sede del Consell Insular de Menorca y en la remodelación de distintos hoteles así como otros proyectos singulares como las 35 casas bioclimáticas que se construyeron en Binisafua, un condominio de viviendas situado en el sur de Menorca.
En 2005 la empresa dio un paso decisivo para su futuro con la modernización y reorganización de sus instalaciones del polígono con el objetivo de hacer frente a los cambios que aventuraban en el mercado de la carpintería y en la forma de trabajar. “Se llevaron a cabo varias inversiones en la formación y especialización del personal así como la modernización de las instalaciones, y maquinaria, adaptándolas a la demanda que habíamos detectado”, explica el gerente. “Esto nos permitió poder trabajar coordinadamente para cumplir con los plazos y consolidar nuestro portfolio basado en una diversificación estratégica de todos aquellos productos relacionados con la carpintería de aluminio, desde grandes cerramientos con balconeras o ventanales de grandes dimensiones, muros cortina, carpintería de madera para interiores y exteriores así como puertas, armarios, vestidores, parquet o mobiliario a medida y la creación de cocinas de diseño”, detalla Emilio Mercadal.
Este dinamismo es el que les ha permitido participar en una larga lista de proyectos de clientes particulares, pero también estar presentes con sus materiales en hoteles de interior muy conocidos como Torralbenc, Can Faustino, Menorca Experimental, Cristine Bedford, Meliá Cala Galdana, Palladium Castell Playa e Insotel Punta Prima, entre muchos otros.
TIENDA CORTIZO. Tras casi cincuenta años de trayectoria, han hecho una apuesta de renovación de sus instalaciones del polígono de Alaior, convirtiendo el espacio en un punto de encuentro para el profesional y el particular, adaptándolo a las necesidades estéticas y a las soluciones técnicas actuales. Primero empezaron por una actualización de su diseño de marca y posteriormente renovaron toda la tienda. “Este último año hemos ampliado nuestro showroom, para mejorar las distintas áreas de exposición”, explica el gerente de Verd Neix. “Además, nos hemos incorporado recientemente a la red de tiendas Ventanas Cortizo, lo que ha supuesto una reafirmación de nuestro vínculo con una marca líder tanto en España como en Europa, cuyos productos fabrica desde hace más de 20 años. Hemos creado un espacio específico en el que los clientes reciben asesoramiento personalizado y pueden conocer de primera mano las últimas novedades en ventanas, puertas y accesorios; ofreciendo también la posibilidad de elegir los distintos acabados mediante muestras reales”, añade Emilio Mercadal.
“Nuestro planteamiento es el del estudio del proyecto desde una perspectiva especializada, pero abordando las propuestas de forma integral. Las necesidades de cada cliente son prioritarias y miramos de dar la mejor asistencia posible y atención personalizada para cada tipo de proyecto”, indica el gerente.
“Buscamos siempre una relación de plena confianza, y gracias a los profesionales que conforman el equipo de Verd Neix, podemos dar una respuesta técnica y funcional, permitiéndonos así alcanzar cualquier objetivo que nos planteen”, concluye Mercadal.