Joan Enric Capellà, CEO de Som Hotels | ARCHIVO

Joan Enric Capellà, fundador y CEO de Som Hotels, no duda en reconocer que la temporada ha sido insatisfactoria y es extremadamente crítico con el convenio colectivo vigente. “Este año hemos vivido los primeros retrocesos en ocupación y precios. Ambas variables arrojan una temporada insatisfactoria, a la que hay que sumar la correspondiente subida de salarios fruto del ‘abrazo del oso' que representa el actual convenio colectivo. Bajada de ingresos y subida de costes es una ecuación sencilla de hacer”, afirma Capellà, que es muy duro con el convenio.

“El comunismo mal entendido es un tremendo error. No se puede aplicar el mismo rasero para un hotel de 500 habitaciones que para un hotelito de 30. Ni los márgenes son los mismos, ni el nivel de gestión, ni el de exigencia a los trabajadores. Son modelos absolutamente distintos. Si no se hace una modificación que contemple remuneraciones progresivas en función del tamaño del establecimiento, contemplaremos la muerte progresiva de los pequeños negocios en favor de los grandes”, añade.

E insiste: “Nuestro convenio ya era bueno y ahora es buenísimo. No se entienden sueldos tan altos en hostelería, que rozan el absurdo si se comparan con muchas profesiones de responsabilidad y que requieren alta preparación o cualificación”, sentencia.

Sobre la regulación del alquiler turístico, Capellà asegura que es un parche. “Es otro parche fruto de la falta de consenso del modelo turístico. Nuestra satisfacción será trabajar por y para un modelo turístico común”, acaba señalando el CEO de Som Hotels.