EFE|VIENA

El Concierto del Año Nuevo de 2005 de la Filarmónica de Viena se convertirá mañana en doble homenaje al director de orquesta Lorin Maazel, quien hace 25 años dirigió por primera vez este célebre evento y en marzo próximo celebra su 75 cumpleaños. El acontecimiento musical, celebrado como es costumbre en la Sala de Oro de la Asociación de Amigos de la Música en Viena, recuerda además el 50 aniversario de la firma del Tratado del Estado, con el que Austria tras la anexión nazi y la posterior ocupación aliada volvió a ser un país soberano.

El concierto de los valses y las polkas, «evento más popular de la música clásica», según lo ha calificado el jefe de la empresa discográfica Deutsche Grammophon, Michael Lang, llegará mañana en su 47ª retransmisión en directo por radio y televisión, a gran parte de los países del mundo. Con once apariciones, Maazel es el director de orquesta que más veces ha dirigido a la Filarmónica de Viena en Año Nuevo, después de Willy Boskovsky, fallecido en 1991, quien fue durante 30 años primer violín de esa orquesta.

Igual que solía hacer Boskovsky, Maazel también hará de solista con el violín, y se espera que su actuación se convierta en uno de los puntos culminantes del concierto. Aún más veces que Maazel, unas quince, el Concierto del Año Nuevo ha contado con el director de escena para las imágenes Brian Large, quien según dijo, se ha propuesto esta vez crear un ambiente especial para que el público pueda «escaparse a los problemas del siglo XXI».

Las escenas de ballet para acompañar la música que se transmite en la versión televisada se desarrollan en lugares diversos de Austria que tienen alguna relación biográfica con el clan musical de la dinastía de músicos de la familia Strauss. Así, en el Palacio Todesco de Viena, Johann Strauss hijo llegó a conocer a su primera esposa, Jetty Treffz, y en el suntuoso Palacio Coburgo, renovado hace un año, tuvieron lugar dos estrenos de obras suyas. En las salas de fiesta del Palacio Coburgo, el bailarín Vladimir Malajov, intendente del Ballet del Estado de Berlín, intervendrá como solista junto con Polina Semionova en una Polka Mazur de Johann Strauss hijo.

Otra escena de baile, que sirve de trasfondo para el vals «Mil y una noches», también de Johann Strauss hijo, se rueda en los «Mundos de Cristal» de la empresa Swarovski, en la localidad de Wattens, Tirol.

La Filarmónica de Viena interpretará por primera vez en el Concierto del Año Nuevo varias obras poco conocidas, como la «Marcha Indigo», la «Polka Haute Volée» (Polka de la Alta Sociedad) y «Winterlust» (Los placeres del invierno) de Johann Strauss hijo, al igual que «A la vienesa», polka a la francesa del compositor austríaco Josef Hellmesberger. La Deutsche Grammophon alemana editará el 7 de enero el cd del concierto.