Inauguración de la doble exposición de fotografías, ayer en el parking del Consell Insular.Fotos: MARCO TORRES.

El parking del Consell Insular dejará durante un tiempo de cumplir su función natural, ya que desde ayer alberga una doble exposición de fotografías con motivo de los actos programados para celebrar el 25º aniversario de la creación de la primera institución pitiusa. La muestra se titula «25 anys de Consell, 25 anys d'història de les Pitiüses», y como complemento «L'Eivissa de Narcís Puget, fotògraf», que fue inaugurada con la presencia de los responsables políticos de la entidad así como de un buen número de ciudadanos invitados al acto.

Por lo que hace a la muestra sobre las bodas de plata del Consell y el correlato de la evolución de la sociedad pitiusa, la mayoría de las instantáneas corresponden a la colección Buil Mayral. Según explicó a este periódico Lina Sansano, coordinadora de la exposición y directora del Museu d'Etnografia, la creación del Consell significó de algún modo «la recuperación del autogobierno de estas islas, cuyo precedente fue la Universitat, el sistema de gobierno por el que se regían las Pitiüses hasta 1715, cuando se perdido por los decretos de Nueva Planta». Sansano recordó que tales decretos se impusieron como consecuencia de la guerra de sucesión para decidir qué dinastía gobernaría España: «Los países catalanes estaban a favor de los Ahusarais, pero ganaron los Borbones, en concreto Felipe V, que lo primero que hizo fue eliminar la lengua autóctona, los derechos de autogobierno, apropiarse de ses Salines... En fin, un desastre».

En cuanto a la muestra sobre Narcís Puget Viñas fotógrafo, ha sido posible gracias a dos donaciones al Consell para que figuren en los fondos del Arxiu d'Imatge i Só, creado durante la pasada legislatura. «Se habían perdido sus negativos, pero nosotros los hemos encontrado por dos sitios diferentes, un particular anónimo y la familia del artista, más conocido como pintor, ya que su actividad de fotógrafo sólo la ejerció como recurso para mantener a la familia». Lina Sansano explicó asimismo los curiosos cambios que dio la trayectoria artística de quien es considerado el padre de la pintura ibicenca: «En principio, se fue a Barcelona a estudiar música, y allí se puso a trabajar para poder mantenerse en un estudio de fotografía. Como ya empezaban a colorearse los negativos, entró en contracto con la pintura, que fue lo que realmente le entusiasmó, fue su faceta artística más conocida y celebrada y a la que debe su prestigio».