Una de las fotos premiadas del Castillo de Eivissa.
Otra de las fotos premiadas.

S. M. DEBELIUS
Lourdes Grivé ha sido galardonada con el Premio Nacional de Fotografía Profesional Lux 2003 en la categoría de Arquitectura e Interiorismo, con su obra «Es Castell d'Eivissa». Esta joven artista ibicenca se dedicaba a la moda hasta que descubrió la arquitectura de la mano de su tío, Salvador Roig, para el que hizo las fotos galardonadas. «Ganar este premio ha sido muy bonito. Tuve que ir al Palacio de Congresos de Barcelona a recoger el premio y estaba bastante nerviosa porque éramos cerca de 800 personas las que nos presentamos en diferentes categorías. Además es un placer que las fotos ganadoras sean del Castillo porque forma parte de nuestro patrimonio y nuestra historia», dice orgullosa. «Este premio es una oportunidad muy grande porque hace que mi nombre se oiga más y tenga más valor».

La APF en colaboración con Sonimagfoto son los que se encargan de organizar y convocar los premios Lux. Lourdes ya se había presentado en el 2000, en la categoría de moda, en la que ganó el Premio Junior.

Este reconocimiento le ha permitido exponer en la isla, su tierra natal, gracias a la Asociación de Artistas Visuales y al Consell. La AAVIB, de la que también es socia, está organizando la exposición en su sede de sa Drassaneta el próximo 3 de noviembre para celebrar este premio y mostrar su obra al público ibicenco. «Estoy muy contenta. Después de estar seis años fuera de la isla trabajando y moviéndome de un lado a otro, voy a poder enseñarles a mis padres y amigos quién soy y a lo que me dedico ya que parece que a veces no llegan a entender muy bien qué haces tanto tiempo fuera de casa», comenta con una amplia sonrisa.

Esta joven ibicenca siempre supo que lo suyo era la fotografía, comenzó trabajando en el Diario de Ibiza, pero se fue a Barcelona para estudiar y poder conocer de cerca el mundo de la imagen. Allí también estuvo trabajando con varios fotógrafos de moda y de publicidad. «Aprendí mucho y me hice socia de la APF. A partir de ahí empecé a asistir a cursos y a conocer más este mundo», explica Lourdes.

Lourdes hace su trabajo concienzudamente sin que nada se le escape. «La fotografía que hago la estudio mucho, trabajo con la luz y puedo esperar lo que haga falta hasta encontrar ese momento clave y esa luz que estaba esperando. Me gusta mucho observarla».

Con la sonrisa permanente que la caracteriza, Lourdes mira al futuro con optimismo y espera seguir trabajando de freelance y aprendiendo de la vida.