«Le Fabuleux destin d'Amélie Poulain», cumplió en la noche del pasado sábado las espectativas al convertirse en la película más galardonada en la ceremonia de los Cesar del cine francés, con cuatro estatuillas, pero no arrasó, tuvo que compartir la gloria y su destino ahora está en los Oscar. La Academia francesa consideró, en esta vigésimo séptima edición de entrega de sus premios que «Amélie» fue la mejor película de 2001, y también fue agraciada con los galardones al mejor director (Jean Pierre Jeunet), la mejor música (Yann Tiersen) y el mejor decorado (Aline Bonetto). Pero tuvo que compartir la gloria de la velada con «Sur mes levres», de Jacques Audiard, y «La chambre des officiers», de Francois Dupeyron, que lograron tres y dos estatuillas respectivamente.

En «Sur mes levres», la Academia recompensó a Emmanuelle Devos como mejor actriz (que rompió los pronósticos que daban como favorita a Audrey Tautou por «Amélie»), además de los Cesar al mejor guión original mejor sonido. En «La chambre des officiers», fueron premiados André Dussonier como mejor actor de reparto y a Tetsuo Nagata por la fotografía. Otro de los grandes Cesar, mejor actor, fue para Michel Bouquet, por «Comment j'ai tué mon pere».

A pesar de las exageradas espectativas que se habían puesto en «Amélie», Jeunet se lleva el tercer Cesar de su carrera como director. El premio quizás más indiscutible de su cinta fue el de la mejor música, para Yann Tiersen. El Cesar a la mejor primera obra de ficción fue a parar a «No Man's Land», de Danis Tanovic. La mejor película extranjera para la Academia francesa fue «Mulholland drive», de David Lynch.