La iglesia de Puig de Missa fue ayer el marco del primer concierto del un ciclo de cuatro que el Orpheon de Viena ofrecerá esta semana en la isla de Eivissa. El tiempo desapacible y la resaca de la Nochevieja influyeron notablemente a la hora de que la gente acudiera a la velada que dirigió el cubano José Vázquez, quien olvidó desconectar su móvil antes de empezar el concierto, y lo atendió en vivo y en directo.

Junto a la tocada por el propio director, las otras cuatro violas de gamba estuvieron en manos de Lucia Krommer, Eva Fürtinger, Christa Oriessnig e Irene Schulmeister. La parte vocal del concierto corrió a cargo del contratenor Thomas Künne.

El segundo concierto del ciclo que, patrocinado por la Conselleria de Cultura, ofrece en la isla el Orpheon de Viena, tendrá lugar a las ocho de esta noche en la iglesia parroquial de Sant Antoni; el tercero será el viernes día 4 en la iglesia de Jesús, y el último el domingo día 6 en la de Santo Domingo (Eivissa). En cada concierto el grupo interpretará un programa distinto.