El lienzo titulado «Gitanillo desnudo», cuya atribución al pintor español Pablo Picasso es objeto de una polémica en España, se quedó ayer sin vender en una subasta celebrada en la galería Sotheby de Londres. El cuadro, de 49'7 por 32 centímetros y fechado en 1898-1899, pertenece al escritor y coleccionista Enrique García-Heráiz y salió a subasta con un precio estimado de entre 213.000 y 284.000 euros.

Al no conseguir durante la puja el mínimo precio estimado, el cuadro se quedó sin vender en la subasta de Sotheby s, que considera que se trata de uno de los trabajos más tempranos del artista. García-Heráiz, quien se encontraba en la sala, explicó en declaraciones a la prensa que en 1988 adquirió en la sala Durán de Madrid este cuadro por 32.000 pesetas junto con otro titulado «Hombre desnudo de espaldas» y un dibujo atribuidos a Picasso. La autenticidad del cuadro ha sido certificada por Josep Palau i Fabre, considerado la máxima autoridad sobre Picasso; y por la hija del artista, Maya Widmaier. Pero según un artículo publicado el pasado mes por el periódico La Vanguardia, Javier Tercero, miembro de la Junta de Calificación, Valoración y Exportación de Bienes del Patrimonio, sostiene que el «Gitanillo desnudo» no fue realizado por Picasso.

Tras manifestar su «decepción» porque el cuadro no encontró hoy comprador, García-Herráiz consideró que se hubiesen obtenido mejores resultados en otra subasta y con una mayor promoción del cuadro, del que afirma que es una obra «clave para entender» la serie «Arlequín» de Picasso. Antes de llegar a manos de García-Herráiz, el cuadro perteneció al madrileño Carlos Postigo.