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Las obras de restauración del «porxo» de la iglesia de Sant Carles, que en principio iban a ser iniciadas ayer, se retrasarán hasta mediados del próximo mes de noviembre. La causa es debida a que el párroco de la localidad considera que serían un problema para la adecuada celebración de las fiestas patronales, que comienzan el 1 de noviembre, ya que molestarían al normal desarrollo de las mismas, según explicó ayer a este periódico don Josep Estaller.
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