El primer ministro británico, Tony Blair, ha intervenido personalmente en las discusiones sobre los frisos del Partenón griego y ha descartado categóricamente su devolución a Grecia, según destacó ayer el diario «The Guardian». Esta decisión supone un revés para las aspiraciones de Grecia de recuperar los frisos, de una antigüedad de 2.500 años y que fueron donados al British Museum hace más de 180 años, afirma el periódico.

Los frisos fueron retirados del Partenón por el aristócrata británico lord Elgin para decorar su mansión en el Reino Unido. En su afán por recuperar las antiguas piezas, el Gobierno griego planea proponer al ministro de Cultura británico, Chris Smith, que considere su devolución como parte de un acuerdo que coincidiría con los Juegos Olímpicos del año 2004 en Atenas.

Lina Mendoni, del Ministerio de Cultura griego, dijo a «The Guardian» que a cambio de la devolución de las esculturas organizaría una exposición de la Grecia antigua en las galerías Duveen, en el British Museum. Asimismo, explicó que el Gobierno griego planea convocar un concurso para el diseño de un museo situado bajo la Acrópolis y manifestó que espera que acudan arquitectos británicos. La decisión de no devolver los frisos contradice las promesas de los predecesores de Blair al frente del Partido Laborista, Neil Kinnock y Michael Foot, según «The Guardian».