Pep Moreno empezó esta curiosa exposición en 1992, a raíz de conocer al mayor coleccionista del mundo de estos librillos.

GUILLERMO ROMANÍ «La idea de realizar un trabajo fotográfico sobre los librillos de papel de fumar se me ocurrió -explica el fotógrafo Pep Moreno- a raíz de conocer a uno de los mejores coleccionistas del mundo, Antoni Segarra, que en el año 92 me enseñó un librillo relacionado con el mundo del cine, un mundo con el que estaba y sigo estando relacionado». «Se me ocurrió entonces que se podría retratar la historia de España a través de este medio», cuenta el fotógrafo, quien presenta hasta el día 30 en la sala «Sa Nostra» de Formentera una exposición sobre los 150 años de historia del papel de fumar.

En su búsqueda de material, Moreno conoció a varios coleccionistas de Barcelona y uno de Palma de Mallorca: «De la casa Roca, que aún conservaba bastantes librillos de esta fábrica que fue de las más importantes de Mallorca, junto a la de Francesc Planells», explica. Para realizar su trabajo, el paciente artista ha empleado cerca de siete años («claro está que no diariamente»), ya que tuvo que contactar con coleccionistas, viajar a distintos lugares y «visitar museos como la Casa del Ardiaca de Barcelona, el Museo Marés, la fábrica Smoking o el Museo de Capellades, que es la población donde, desde 1752, se empezaron a fabricar».

Asimismo, Moreno ha podido constatar que por esa época en Alcoy ya se fabricaba un papel muy fino especial para fumar, señalando que Cataluña y el País Valenciano fueron tradicionalmente las regiones donde estuvieron los principales fabricantes de papel de fumar, aunque en la actualidad sea Capellades la capital de este producto, ya que fabrican papel de fumar para prácticamente todo el mundo, aunque no se llega a la profusión de marcas de otras épocas.