El tenor canario Alfredo Kraus Trujillo falleció sobre las cinco de la tarde de ayer en su domicilio particular de la Urbanización Montepríncipe de Madrid a los 72 años de edad. Kraus, uno de los mejores tenores del mundo del Siglo XX, padecía una grave dolencia degenerativa (un cáncer de pancreas), que se vio agudizada por la tristeza que le produjo el fallecimiento, hace un año, de su esposa. En el momento del fallecimiento, el cantante lírico estaba acompañado por sus familiares más cercanos. Según un miembro de la familia, la muerte le llegó «dulcemente» al tenor. «Era ya esperado, pero nunca se pierde la esperanza. Tenemos el consuelo de que no ha sufrido», señaló.

El tenor fue tratado de su dolencia en un centro de EE UU y en Madrid, donde el pasado mes de junio estuvo hospitalizado varias semanas en la Clínica Puerta del Hierro. Desde allí, Kraus fue trasladado a su domicilio, donde fue visitado por compañeros de profesión como Plácido Domingo o Teresa Berganza. Precisamente, la mezzosoprano declaró al conocer la noticia que había perdido «a un gran, gran amigo». Con respecto al recuerdo de la esposa del tenor, Berganza afirmó que Kraus «sólo soñaba con reunirse con ella. Si ha dejado de sufrir, bendito sea». La dirección del Teatro de la Zarzuela y la Unesco declararon estar consternados por su muerte.