Joan Josep Serra Rodríguez recibió el diploma de manos de Pilar Costa. FOTO: GERMÁN G. LAMA

Como ya es tradicional, la celebración del 8 de agosto en la plaza del Ayuntamiento de Eivissa se convirtió en el marco en el que fueron entregados los diplomas acreditativos a los ganadores del premio de investigación histórica que llevan esta fecha como denominador y que en la presente edición ha contado con dos galardonados. El presidente del Govern balear, Francesc Antich, y la presidenta del Consell Insular, Pilar Costa, entregaron por última vez el premio a obras escritas en castellano, debido a la intención del Consell de convocarlos exclusivamente en catalán a partir de la próxima edición..

En primer lugar, recibió el diploma, de manos de Pilar Costa, Joan Josep Serra Rodríguez, quien mereció la distinción por su trabajo titulado «Fortificaciones rurales en la isla de Ibiza: las torres de defensa prediales».

Por su parte, Francesc Antich debía entregarlo a María Elena Mateu Prats, quien no se encontraba en la isla, por lo que lo recogió en su nombre su hermano. Precisamente, Ultima Hora Ibiza y Formentera logró ponerse ayer en contacto con la ganadora -autora del estudio «El mundo devocional en Ibiza. (Retaules e Imatges del coleccionismo privado. Siglos XVII y XVIII)». «Estoy muy contenta. Tenía previsto trasladarme a la isla, pero al final me ha sido imposible», comentó María Elena Mateu desde su domicilio de Madrid.

Doctora en Geografía e Historia, en la especialización de Prehistoria y Arqueología, María Elena Mateu explicó que su ensayo constituye un «volcado de los Protocolos ibicencos en lo que se refiere a los retablos e imágenes en aquellos siglos». «Paso mucho tiempo en Eivissa -continuó- y lo que hago es recopilar la información en la isla, porque esa es la base del trabajo, para después complementarlo y ampliarlo con la documentación que recojo en bibliotecas y centros de investigación de otras ciudades».

María Elena Mateu nació en Mallorca, aunque su madre es ibicenca. Al respecto de por qué escribió su trabajo en castellano, la ganadora aclaró que, si bien entiende a la perfección el catalán, el ensayo prefirió escribirlo en castellano debido a «los términos técnicos que incluye. La lengua que domino en este aspecto es el castellano, por lo que de haberlo escrito en catalán hubiera quedado más pobre». Mateu Prats ya publicó un ensayo sobre la joyería ibicenca, basado en la tesina que presentó para su licenciatura. Además, ha colaborado, entre otras, con la revista «Eivissa» .