Una ambulancia del SAMU 061 de Baleares. | Europa Press

El Comité de Empresa de Gestión Sanitaria y Asistencial de Baleares (Gsaib), al completo y por unanimidad, ha decidido realizar una convocatoria de huelga y ha anunciado también concentraciones todos los viernes.

Gsaib es la empresa encargada del transporte sanitario del Servicio de Salud de Baleares (IbSalut), así como de la central de emergencias y de la central de gestión del transporte programado, según han recordado en un comunicado desde el Comité de Empresa --compuesto por los sindicatos FS-TES, USAE, CCOO y UGT--.

Las movilizaciones tienen previsto comenzar con concentraciones frente a la sede del IbSalut el próximo viernes 13 diciembre así como todos los viernes siguientes desde las 10.00 horas hasta las 12.00 horas en la calle Reina Esclaramunda.

Por otro lado, han convocado para el día 20 de diciembre paros parciales comprendidos entre las 10.00 y las 12.00 horas y desde las 17.00 hasta las 19.00 horas. Según han advertido, si no se ha conseguido "ningún avance serio", seguirán con una jornada de huelga a partir del 23 de diciembre durante las 24 horas del día y de forma indefinida.

Los motivos de la huelga son la "continua y crónica falta de diálogo, dejadez, desidia, pasividad y desfachatez" que, a su parecer, vienen "soportando" por parte de la dirección de la empresa y sus responsables. También han criticado la "poca implicación" por parte del IbSalut como responsable directo de dicha empresa pública, que cuenta con más de 900 trabajadores.

Igualmente, según el Comité de Empresa, Gsaib les ha trasladado un informe jurídico efectuado por personal de IbSalut con la decisión de reclasificar las categorías de los trabajadores. En concreto, considerando que los trabajadores del transporte sanitario programado y el personal de la central de gestión y coordinación de programados "no son sanitarios, alegando que dichos trabajadores transportan personas o cosas", y a los gestores de emergencia de la central de gestión y coordinación "los equipara a un auxiliar de recepción que tan solo responden llamadas y toman nota".

Para el comité de empresa es "inadmisible" dicha reclasificación y han presentado alegaciones jurídicas "ante tal atropello e incumplimiento" por parte de Gsaib de reales decretos a nivel nacional, como normativas varias.

Además, han lamentado que la gerencia de Gsaib hizo "caso omiso", en una reunión el pasado viernes, a "todas y cada una de las alegaciones presentadas", comunicando al comité de empresa que seguirá adelante con la reclasificación.

En este sentido, el responsable del Transporte Sanitario de UGT Baleares, Javier Marin, ha lamentado que la empresa pretenda convertir a la mitad de los técnicos emergencias sanitarias en transportistas de personas o cosas, "como así describe el propio IbSalut a los pacientes que trasladan estas ambulancias del transporte sanitario programado para acudir a tratamientos varios o salidas de planta hacia sus domicilios".

"Esas definiciones tan alegremente vertidas por la administración haciendo referencia a los pacientes, tal como definen la profesión del transporte sanitario programado, como que transportan personas o cosas, nos parece una falta de ética y respeto muy grande por parte de este Govern no solo a los profesionales de dicho servicio, sino a los propios pacientes y usuarios que precisan de las ambulancias a diario", ha subrayado Marin.

Por otro lado, ha calificado de "aberración" que el gerente del Gsaib "se suba el sueldo 35.000 euros, llegando a cobrar unos 91.000 euros al año", cuando tiene a trabajadores a su cargo a los que, ha asegurado, se le debe dinero desde mayo de 2022 y desde enero 2023.

De su lado, el representante de CCOO, Bartolomé Nadal, ha lamentado que "no se valore al profesional que trabaja en el servicio del Transporte Sanitario Programado y central a la hora de su clasificación", a la vez que ha añadido que todos los técnicos de emergencias sanitarias "deben ser clasificados como lo que son".

"Desde CCOO creemos en un servicio integral de ambulancias para las islas con profesionales valorados y titulados y lucharemos para que así sea. Los pacientes merecen lo mejor", ha recalcado Nadal.

En palabras del responsable de Acción sindical de USAE Baleares, Alejandro Juan, "se debe apostar por cuidar a todos los profesionales que cuidan de toda la población balear, como aboga el slogan del actual Govern". "Por eso no entendemos que los profesionales de Gsaib no sean valorados como se merecen", ha apuntado.

Por otro lado, según el Comité de empresa, se están creando puestos de trabajo nuevos donde los cargos intermedios y de coordinación "colocan de manera discrecional a profesionales, vulnerando el criterio de Igualdad, Mérito y Capacidad". "Hecho desmotivador para el resto de la plantilla", han agregado.

En materia de seguridad, han expuesto que el parque móvil de ambulancias está en una situación "pésima" y "por la mala gestión de la antigua dirección de la empresa aún estará a un año para su renovación".

"Esta empresa está actuando de forma más propia de la privada que de una empresa pública donde debe primar la negociación colectiva entre empresa y agentes sociales. Esto solo tiene un camino que se llama estatutarización", ha concluido Alejandro Juan.

En esta línea, el responsable del Sindicato de Técnicos FS-TES, Rubén Uroz, ha explicado que han acreditado con "argumentos de peso" a través de su impugnación al informe jurídico de Gsaib, que todo el personal de la empresa debe ser profesional sanitario, independientemente de si está en el servicio urgente o programado.

"Es un insulto a la profesionalidad del servicio de programados, no reconocerles como profesionales sanitarios, tratándolos de conductores/as o transportistas", ha argumentado Uroz.

Por último, el presidente y secretario del Comité de Empresa, José Ramon Cerdo y Francisco Muñoz de los sindicatos USAE y UGT, han explicado que "ante la pasividad y desidia con la que la dirección de la empresa y sus responsables afrontan el diálogo y negociación con la parte social", el Comité se ha visto "obligado" a la convocatoria de movilizaciones "en busca de un cambio de talante y soluciones que permitan avanzar".

"El tiempo y la paciencia se acaba, por lo que vamos a utilizar todas las herramientas que estén a nuestra disposición para revertir la situación actual y exigir respeto, por lo que esperamos que tanto la dirección de la empresa y sus responsables, así como el propio IbSalut sean responsables para que este conflicto no llegue a padecerlo los pacientes", han finalizado los sindicalistas.