Gómez, Ribot y Sans mostrando este viernes sus propuestas.

Podemos quiere que se note el paso de la izquierda por las instituciones y considera que garantizar el acceso a la vivienda es una obligación de los poderes públicos, además de una seña de identidad de su formación política. Por ese motivo presentará en los tres consells insulars una moción con medidas concretas para la que sus tres portavoces insulares –Aurora Ribot, de Mallorca; Cristina Gómez, de Menorca y Viviana Sans, de Eivissa– reclamaron el apoyo expreso de sus socios de coalición.

El punto quinto de esa moción (idéntica en los tres consells, salvo en lo referente al nombre de cada Isla) insta al Gobierno estatal a    «restringir la compra de viviendas a las personas que no hayan residido dos años al menos» en Baleares. Los otros cuatro puntos de la moción pasan por requerir a ese mismo Gobierno para que «realice las gestiones pertinentes con la SAREB [el conocido como ‘banco malo' ] para realizar las gestiones pertinentes para que tanto su parque público como el suelo urbanizable que atesora se dedique a alquiler social»; por instar al Govern a que declare Mallorca, Menorca y Eivissa como «zona tensionada»; a una reforma de la ley autonómica de vivienda para rebajar el número de viviendas necesarias para ser considerado «gran tenedor» de pisos y a modificar el reglamento de la misma.     

Medidas «valientes»

«El mercado tiene unos precios desorbitados porque hay quien adquiere viviendas para uso no residencial, que solo se usan unas pocas semanas al año y que se quedan vacías, cuando la gente de las Islas, residentes aquí, no puede desarrollar sus proyectos de vida al no tener acceso a una vivienda digna», indicó Aurora Ribot, que además es vicepresidenta del Consell de Mallorca. De manera paralela, Podemos quiere que la comisión se seguimiento de pactos analice la política de vivienda y lo que todavía queda por hacer y    asuma propuestas «más valientes» antes de que termine esta legislatura.