Sánchez, en una entrevista concedida a 'El País', explica que el Gobierno ya ha comunicado a los agentes sociales su voluntad de poner en marcha ese plan.
Por otra parte, respecto al conflicto catalán, Sánchez afirma que «los tiempos en que el Gobierno agravaba los problemas con Cataluña acabaron».
El presidente del Gobierno reconoce que «la crisis en Cataluña no se va a resolver en un año ni en dos, ni en cinco ni seis», y considera que para su solución será necesario «generosidad y esfuerzo» de todas las partes durante la próxima década.
En relación a la inmigración, Sánchez considera que la política migratoria «tiene que tener una respuesta común, europea». En su opinión, «la eurofobia es el principal desafío que tiene la UE».
En materia económica, el presidente del Gobierno apoya que los sindicatos y empresarios acuerden una escalada de subida de los sueldos, a la vez que considera necesaria la derogación de la reforma laboral, aunque reconoce que no hay una mayoría parlamentaria para hacerlo.
Además afirma que le gustaría la creación del impuesto de transacciones financieras, y que se pudiera culminar la unión bancaria.
Por otra parte, muestra su deseo de que el traslado de los restos de Franco del Valle de los Caídos sea inmediato y dice que tiene claro el perfil para presidir RTVE, pero no el nombre.
Por último expresa su deseo de que esta legislatura acabe con una ley de eutanasia y que sea un servicio de la sanidad pública.
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