Fran Grima salta para evitar el contacto con Pierre. | Marcelo Sastre

UD IBIZA: 1
OVIEDO: 1

De empate en empate y tiro porque me toca. Así ha rebautizado la UD Ibiza el famoso y clásico juego de La Oca. Partido que juega el equipo celeste, partido que normalmente acaba en tablas. Esa es la línea, prácticamente recta, del conjunto unionista, que ayer sumó un nuevo punto contra el Oviedo (1-1). Ya son cinco las veces que los ibicencos han sellado un empate en seis encuentros. De esta forma, la escuadra de Juan Carlos Carcedo ha firmado tablas el 83,3 por ciento de las veces hasta la fecha, con la excepción de la victoria en Leganés (1-2).

[Las mejores imágenes del partido entre la UD Ibiza y el Oviedo (1-1).]

Juan Carlos Carcedo renovó por completo la parcela ofensiva. El míster retrasó al puesto de mediocentro a Javi Pérez, que la semana pasada había actuado como mediapunta, y situó a Javi Lara y Davo en las bandas en lugar de Bogusz y Nono. Lo más llamativo fue la ausencia en el once inicial de Sergio Castel en la punta de la lanza, que llevaba tres jornadas consecutivas marcando. El ariete venía atravesando un proceso febril durante la semana, pero el míster había confesado el viernes que estaba en perfectas condiciones, por lo que nadie podía imaginar que comenzara en el banquillo.

El que no cambió absolutamente nada fue Ziganda. El técnico del conjunto asturiano plantó exactamente el mismo once que venció en la fecha anterior al Cartagena por 2-0, con Obeng y Bastón como principales baluartes ofensivos.

La primera parte resultó bastante atractiva. Ambos equipos practicaron un buen fútbol, dejando constancia de su buena capacidad de triangulación para generar peligro. Sin embargo, los dos carecieron de ese acierto en el último pase para desequilibrar la balanza.

La primera gran ocasión no se hizo esperar. A los cuatro minutos, Lucas dio un pase en profundidad a Borja Bastón, que chutó cruzado rozando el palo derecho de la portería de Germán. La réplica la dio Javi Pérez poco después con un disparo desde la frontal del área que buscó sin suerte la escuadra.

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Los ovetenses comenzaron a buscar la habilidad de Viti por el costado derecho para generar peligro. El '7' fue una pesadilla para la zaga celeste, pero, afortunadamente para ella, los visitantes no supieron sacar tajada de sus acciones.

El que sí estuvo cerca de encontrar premio fue Goldar. El central cabeceó a las mil maravillas un centro de Javi Lara al segundo palo, pero Femenías realizó una estirada espectacular abajo para enviar la pelota a córner. Paradón. Sin embargo, no estuvo tan fino en el 35, instante en que se desniveló la balanza. Javi Lara recogió en el área un centro pasado de Guerrero, bailó con el balón en los pies delante de su defensor para buscar un hueco y sacarse un zapatazo raso al palo corto que se tragó el guardameta en la última acción reseñable del primer tiempo.

Tras el descanso, con los mismos jugadores sobre el terreno de juego, el duelo se reinició con una marcha menos. Esa pausa beneficiaba al cuadro de Juan Carlos Carcedo, que marchaba por delante en el marcador. Ziganda se vio obligado a mover el banquillo con el fin de agitar el partido. Brugman y Jirka entraron por Luismi y Viti. La respuesta por parte local no se hizo esperar con un triple cambio para refrescar el ataque: Castel, Nono y Bogusz por Guerrero, Davo y Lara.

El pichichi unionista tuvo la oportunidad de poner tierra de por medio tras un centro lateral que remató en boca de gol, pero el cancerbero tiró de reflejos para sacar una mano providencial. El Oviedo le dio otra vuelta de tuerca a la situación con un triple cambio: Javi Mier, Montiel y Aias por Obeng, Jimmy y Borja Sánchez. Al final, los cambios surtieron efecto. Una falta lateral botada por Montiel la remató Brugman para subir el 1-1 al electrónico. Con todo, hubo hasta cuatro minutos de suspense porque el VAR chequeaba el tanto por un posible fuera de juego que, finalmente, no existió.

El empate inyectó una dosis de moral amplia al equipo visitante, que se vino arriba y buscó con ahínco el segundo tanto. A la UD Ibiza se le empezaba a hacer largo el encuentro, máxime cuando vio cómo Javi Mier fallaba un pase de la muerte a cinco metros de la portería. La insistencia de los asturianos fue total, pero Bastón y Jirka tampoco hallaron el camino hacia el gol en sus intentos y se llegó al final del partido sin cambios en el marcador.

De esta forma, el conjunto celeste se mantiene invicto con un balance de cinco empates y una victoria. Por su parte, el Oviedo ve truncada su racha de dos victorias consecutivas en un estadio de Can Misses que continúa siendo inexpugnable.