El Ushuaïa Ibiza Voley estará en la Copa del Rey, que, a falta de confirmación oficial, se celebrará en Cáceres el próximo mes de febrero. El equipo ibicenco consiguió finalmente su objetivo de acceder al torneo copero, donde se medirá en cuartos al Melilla, una clasificación que ha obtenido con mucho más sufrimiento del esperado. No en vano, varios tropiezos inesperados a lo largo de la campaña le condujo a jugarse el pase en la pista del todopoderoso CAI Teruel, donde debía sumar al menos un punto para no tener que echar la mirada a canchas ajenas.

Los turolenses solamente habían perdido un encuentro en toda la liga. Fue contra el Unicaja Almería hace un par de semanas. Por si no fuera bastante, todos los encuentros, a excepción del citado, los había ganado por dos o más sets de diferencia, por lo que la tarea de conseguir dos mangas en Teruel era realmente complicada. Afortunadamente, no hizo falta llamar a Tom Cruise para llevar a cabo esta especie de misión imposible. Y es que los amarillos se hicieron con el primer y el tercer juego para tomar aire y evitar lo que, para muchos, habría sido un auténtico descalabro en la temporada que mejor plantilla ha confeccionado.

El partido comenzó con dos equipos que jugaban de tú a tú. El Ushuaïa Ibiza Voley se puso 6-7 arriba incluso, pero, entonces, un parcial 3-0 empezaba a hacer peligrar el primer set (10-7). Con 15-13 llegó una pájara monumental que parecía decantar la manga para los locales, que se escaparon de siete puntos (20-13). Nada más lejos de la realidad. El conjunto de Toni Gino sacó toda su casta a relucir, estrechó el marcador hasta colocarse a uno (21-20) y remontó para ponerse 23-24. Finalmente, su fe le condujo al 0-1 por 24-26. Impresionante.

Ya quedaba menos faena por hacer. Una manga más y la clasificación copera estaría en el bolsillo. Sin embargo, delante estaba el CAI Teruel, escuadra que en los últimos años ha dominado el panorama nacional junto con el Unicaja Almería. Herido en su orgullo, el conjunto de Carlos Carreño se convirtió en una máquina imparable. Un 7-2 de inicio se acabó convirtiendo en un 18-10 que dejaba la manga vista para sentencia. El CAI Teruel tomó nota de lo sucedido anteriormente y, esta vez, no se dejó sorprender. El 25-18 reflejó lo visto sobre la pista.

En el tercer juego, la igualdad fue la tónica dominante. Ninguno de los dos equipos logró distanciarse de más de dos puntos hasta el 21-20. Entonces, Toni Gino solicitó tiempo muerto y el chip de los suyos cambió por completo. Un parcial 0-5, con dos puntos de Osorio, otros tantos de Diedhiou –fue el encargado de sentenciar el set– y un error de Riecks, brindó el 21-25 con el que el cuadro ibicenco certificó el pase a la Copa del Rey. Misión cumplida.

Pero el partido no había acabado aún. Había algo más en juego, una cuenta pendiente. Y es que el Ushuaïa Ibiza Voley, ese plantel confeccionado para codearse con el binomio CAI Teruel-Unicaja, aún no había ganado a un grande. De paso, una victoria acallaría a quienes se atrevieran a poner en duda la legitimidad del punto conseguido. Así las cosas, el cuadro de Toni Gino saltó de nuevo a la pista decidido a apuntarse el triunfo.

Un 2-7 de inicio obligó a Carlos Carreño a pedir tiempo muerto. No sirvió de mucho, pues los visitantes llegaron a mandar de ocho puntos (6-14). Sin embargo, se vivió algo parecido al primer set, pero con los papeles cambiados, y el cuadro turolense, tras empatar a 21, volteó el marcador para ganar por 25-22.

El equilibrio fue total en el tie-break. El Ushuaïa logró un colchón de dos puntos (7-9), pero éste se desvaneció pronto (11-10). El técnico visitante paró entonces el partido y los suyos remontaron (11-12) para, después, llegar a goza de dos bolas de partido (12-14). La primera no supo aprovecharla el ayer intratable Raúl Muñoz –fue el máximo realizador del partido y el mejor junto a Miraglia–, que se encontró con el bloqueo de Altayó. El que no falló fue Solanas, cuyo remate dio un triunfo de prestigio a un Ushuaïa que, como el ave Fénix, ha renacido de sus cenizas.

EN LA RED

Remontada: Los pupilos de Toni Gino voltean un 20-13 en el primer set del encuentro en una manga para la historia.

Matador: Raúl Muñoz se convierte en el máximo anotador del partido con 19 puntos y le gana el duelo particular a Fran Muñoz (18).

Explosión: El central brasileño Orestes Miraglia realiza su mejor partido desde que fichó por el Ushuaïa Ibiza Voley.

Toni Gino – Ushuaïa Ibiza Voley

“No clasificarnos habría sido un fracaso”

“No clasificarnos habría sido un fracaso”, indicó ayer Toni Gino. El entrenador del Ushuaïa Ibiza Voley pudo respirar tranquilo cuando los suyos consiguieron el segundo set, el que brindaba el punto necesario para acceder a la Copa sin tener que mirar a otros campos, aunque finalmente no hacía ni falta porque el Cajasol Juvasa perdió ante el VP Madrid (3-1).

El míster recordó que “hay equipo para estar arriba” y tenían “mucha presión”. “Jugamos con la motivación que nos faltó otras veces ante un equipo que se estaba poniendo a punto para su partido de competición europea del martes. Para nosotros, esto era un reto para ver cuán lejos estamos de un conjunto que participa en Europa”, explicó.

El técnico comentó que se vivió “un partidazo de cabo a rabo” y destacó la figura de Orestes Miraglia: “Se ha salido. Bueno, lo han hecho todos, pero le he nombrado porque ha hecho su partido más completo desde que está aquí. Necesitaba ponerse a punto, le entraron dudas y a nosotros también, pero ha explotado”. Sobre los 19 puntos de Raúl Muñoz, señaló: “Es una puntuación genial. Le comió la cabeza a Fran Ruiz. Son jugadores parecidos, agresivos y que sacan duro”.

El argentino apuntó que necesitaban “sentir que somos competitivos”. Habíamos tenido mala suerte, pero no queríamos decirlo porque habría sonado a excusa. Ahora, creo que tenemos derecho a manifestar varias cosas. Hemos aguantado palos y nos toca disfrutar de una cosa que todos daban por perdida en el peor campo posible. Los jugadores han dado el do de pecho”, afirmó.