Óscar Santos acabó en segundo lugar con un tiempo de 49'39'' y Antonio Marí, del Triatló Santa Eulària, completó el podio con un crono de 49'53''. En categoría femenina, la ganadora fue Alexia Hartman (CA Pitius) con una marca de 1h00'18. Acabó por delante de Indre Barkute (1h01'47'') y de Pilar Fernández, del URun, que paró el reloj en 1h04'35''.
En esta ocasión, la Passeig a Passeig ha rendido homenaje a los afectados por la Esclerosis Múltiples de Ibiza y Formentera, una lucha que abandera en las Pitiüses el Centro Aemif, estableciendo una donación de tres euros opcional a los participantes.
Guirado, que pretendía quitarse el mal sabor de boca del nacional de cross disputado el pasado sábado en Albacete, dominó la carrera desde el inicio, marcando un ritmo durísimo que fue descolgando rivales muy importantes en el panorama pituso como José Planells o Samuel Urbano. «Hoy –por ayer– me he levantado con mucha energía y creía que podía volar», explicó el atleta, que, para mala fortuna de sus rivales, se apuntó a la carrera a última hora porque llegó de Albacete sobre las siete de la mañana. «Quería salir en grupo por las malas sensaciones que tuve ayer –anteayer para el lector–, pero he ido de menos a más», dijo.
Por su parte, la jovencísima Alexia Hartman, que corría por primera vez la Passeig a Passeig, ha sucedido a Paula Espí en lo más alto del cajón de la prueba. La del CA Pitiús admitió en línea de meta que nunca había corrido una carrera tan larga y que se le había hecho duro. «Aunque tus posibilidades no sean las óptimas, vas a con la mentalidad de competir y de ganar», explicó la corredora, que, antes de salir de Vara de Rey, creía que su máxima rival para la victoria sería Paula Espí, campeona de la pasada edición y que, finalmente, no compitió.
Récord de inscritos
La cursa de 15 kilómetros comenzó casi al unísono en las localidades de Eivissa, donde dio pistoletazo la carrera principal, y Santa Eulària, en la que se organizó una mini prueba que disfrutaron fundamentalmente padres e hijos de corta edad. Como todos los años, se cortó la carretera que une los municipios y los miembros de Protección Civil permanecieron apostados en todo el trayecto para seguridad de los corredores.
El clima primaveral hizo que muchas personas, principalmente familiares y amigos, aprovecharan el carácter festivo del domingo para dar su aliento en la zona de meta situada en el paseo de s'Alamera en la Villa del Río. Poco a poco, fueron llegando buenas noticias a la organización. «662 inscritos en la principal y 365 en la mini», comunicó el portavoz de la Passeig a Passeig mediante los altavoces. Uno de los momentos más emotivos de la prueba fue cuando el gran José Cantero cruzó la línea de meta. El veterano atleta, de 65 años, corrió el pasado fin de semana su maratón número 65 en París. En teoría, éste era el último, pero el corredor avisó: «Mi mujer me dice que no prometa nada que no pueda cumplir».
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No es lo mismo correr aquí en la isla las carreras de amateurs que irse a un Campeonato de España a correr con los "mayores". Allí van los mejores del país y es gente preparada profesionalmente y no es el mismo nivel que las carreras populares que hay aquí. Esto es algo que Guirado tiene que tener en cuenta, que ganar en un nivel amateur no quiere decir que se pueda ganar en nivel pro. Por eso que no tiene que tomárselo como una espina clavada o un mal sabor de boca no triunfar allí, ya solo poder participar a una competición de ese nivel le tiene que suponer un triunfo. Mejorar en competiciones de alto nivel requiere mucho tiempo y esfuerzo y si Guirado realmente desea progresar en esos niveles tendría que trasladarse a la península y entrenar con mas intensidad con entrenadores de alto nivel. A esos niveles no es llegar y besar el santo como puede ocurrir en competiciones de aficionados. En todo caso mi enhorabuena a Adrián y mucho animo que le veo siempre entrenando por Santa Eulalia.