Toda una lección de profesionalidad

PALACIO DE CONGRESOS (13+24+13+16): R. Pérez (14), Morales (7), De Kleijn (9), Charity (18) y Denti (9) -cinco inicial- Bettonvil (0) y Barnert (9).
18 de 43 en tiros de dos puntos, 7 de 17 en triples y 9 de 12 en tiros libres. 38 rebotes (27 defensivos y 11 ofensivos) y 16 faltas personales.

SÓLLER BON DIA! (14+10+20+15): Suárez (6), Ocete (11), Ferrari (14), Traoré (20) y Csaszar (8) -cinco inicial- María España (0) y Stefka Miteva (0).
18 de 43 en tiros de dos puntos, 4 de 12 en triples y 11 de 14 en tiros libres. 23 rebotes (20 defensivos y 3 ofensivos) y 15 faltas personales.

Árbitros: Sánchez Ardid y Martínez Rodríguez. Sin eliminadas por faltas pesonales.

Incidencias: Pabellón municipal de Santa Eulària. Floja entrada, con apenas 100 espectadores en partido correspondiente a la decimoctava jornada de Liga Femenina.

Profesionalidad. Esa es la palabra más empleada ayer en el pabellón de Santa Eulària, en donde el Palacio de Congresos de Ibiza, a pesar de los obstáculos y pese a tenerlo todo en contra, volvió a creer en sus posibilidades de que se puede salir del abismo tras superar en el derbi balear al Sóller Bon Dia! por 66-59.
Después de que la plantilla anunciara este lunes que se iba a la huelga por el impago de dos mensualidades y media, todos eran pesimistas en cuanto al futuro del club, con un panorama cada vez más negro tanto deportiva como económicamente. Sin embargo ha sido cuando peor pintaban las cosas cuando ha aparecido el verdadero espíritu de este equipo, su mejor versión. Hace tiempo que no se veía a un Palacio de Congresos tan combativo, tan metido en el partido, no dando ningún balón por perdido y dejándose literalmente la piel para alcanzar el objetivo.
Lo paradójico es que esa mejoría, el recuperar el sello de identidad de los equipos dirigidos por Ortega, tan peleones como irreductibles, haya tenido que esperar a que se llegara a esa denuncia de la plantilla y a que el equipo no se entrenara en los últimos tres días. Pero tampoco es cuestión de buscarle los tres pies al gato. Lo importante ayer era el triunfo para seguir aspirando a la permanencia, que ahora está a sólo una victoria, lo que se dice al alcance de la mano. Para mañana dejamos la solución a los problemas económicos que, lamentablemente, no son tan fáciles de arreglar.

Reacción
Por si había alguna duda, que no la había, las jugadoras de Palacio saltaron a la pista dispuestas de demostrar su profesionalidad. A dejarse el alma por el equipo. No desfallecieron en ningún momento, a pesar de que, al final, las fuerzas empezaron a escasear. Sin embargo, esta vez querían ganar por encima de todo. Denti, en el minuto 6, puso la primera ventaja (13-6), aunque una canasta de Ocete y dos triples consecutivos de Ferrari hicieron que el Sóller cerrara el primer cuarto con ventaja (13-14). El segundo cuarto fue un auténtico baño de las locales, que llegaron a conseguir un parcial de 21-2 (34-16, minuto 16). Suárez cortó una racha de seis minutos sin anotar, aunque la brecha ya era muy grande. En la segunda mitad, no obstante, el Sóller, con Traoré en plan estelar (16 puntos en el tercer cuarto), empezó a recortar distancias, hasta el punto que volvió a colocarse por delante (55-56, minuto 10). Fue sólo un espejismo. Un nuevo arreón de las ibicencas, que sacaron fuerzas de donde parecía que ya no las había, hizo que sumaran un parcial de 11-3 para conseguir la tercera victoria de la temporada. Una victoria tan peleada como meritoria.

Tres toques
Dos parciales: Un 21-2 en el segundo período puso una máxima ventaja de 18 puntos; el 11-3 final acabó dando la victoria al Palacio.
Charity Egenti: La jugadora nigeriana, con 18 puntos y 13 rebotes, rayó a la perfeccción, como casi todo el conjunto ibicenco.
Silvia Morales: La capitana afirmó que «vamos a luchar siempre, pase lo que pase. Hemos demostrado en la pista que somo un equipo».