Adiós amargo a una difícil temporada

Todo sucedió ayer en el mitin Weltklasse Zürich 2006, considerado uno de los mejores del mundo. Vivancos participaba en la serie B, junto a Aubrey Herring, vencedor de la carrera con 13''43 o los viejos conocidos, Thomas Blaschek y Robert Kronberg. El español tuvo la salida más rápida de los participantes, con un tiempo de reacción de 0.155 milésimas. Sin embargo, a medida que pasaba las vallas se fue quedando atrás.

En palabras de su entrenador, Luis Miguel Calderón: «Él me ha dicho que no sentía el pie batiendo en las vallas. De hecho, al calentar tratando de activar los pies ya se ha dado cuenta de que están agarrotados. Así que hemos decidido parar. Va para Eivissa mañana y va estar ahí cuatro días sin hacer nada y sólo va a volver a competir para el Decanation, porque es un compromiso», asegura.

La medida adoptada por Calderón está encaminada a proteger a su atleta, ya que el técnico se teme que de seguir así se desemboque en una lesión más grave. «Pierde la sensación del pie corriendo y me da miedo de que se rompa un tendón o algo peor y después haya que lamentarlo», explica.

Vivancos sufrió un fuerte esguince alrededor del 20 de diciembre de 2005. Dado que no se afrontaba la pista cubierta la recuperación se llevo calma, pero algo más debió afectar al pie del ibicenco que no le ha dejado entrenar en condiciones en casi toda la temporada. «Ha tenido que ir infiltrado casi desde Semana Santa», aclara Calderón.

El técnico, no obstante, valora la temporada de forma positiva. «No se hizo bien en el europeo y se perdió el récord de invierno y el título nacional, pero no hay que olvidar que ha mejorado su marca personal en 6 centésimas. Creo que teniendo en cuenta como no hemos podido trabajar y como no hemos podido cumplir la planificación de la temporada, ésta ha sido buena», concluye.