FRANCIA: Fabien Barthez (-); Willy Sagnol (-), Lilian Thuram (-), William Gallas (-), Eric Abidal (-); Patrick Vieira (-), Claude Makelele (H); Sylvain Wiltord (-), Zinedine Zidane (H), Florent Malouda (HH)y Thierry Henry (H).

Cambios: Frank Ribery (-) por Sylvain Wiltord, Dhorasso (-) por Malouda y Trezeguet (-)por Zinedine Zidane.

COREA DEL SUR: Lee Woon-jae (H); Kim Dong-jin (H), Kim Young-chul (H), Choi Jin-cheul (H), Lee Young-pyo (H); Kim Nam-il (H), Lee Eul-yong (H), Lee Ho (H), Lee Chun-soo (H), Park Ji-sung (HH) y Cho Jae-jin (H).

Cambios: Seol Ki Hyeon (H) por Lee Eul-yong; Kim Sang-sik (H) por Lee Ho y Ahn Jung-hwan (HH)por Lee Chun-soo.

Àrbitro: Benito Achundia (MEX), mostró tarjeta amarilla a Kim Dong-jin, Lee Ho por los coreanos y a Zidane y Abidal por los franceses.

Goles:
1-0, minuto 9: Henry.
1-1, minuto 81: Park Ji-sung.

Incidencias: Segundo partido del grupo G del Mundial de Alemania disputado en un lleno Estadio Zentralstadion de Leipzig ante 43.000 espectadores. Thuram se convirtió en el francés con más partidos internacionales empatado con Marcel Desailly (116).

Efe|LEIPZIG
Francia empató a uno ante Corea del Sur y se complicó sus posibilidades de supervivencia en el Mundial de Alemania, lo que alimenta la pesadilla de los «bleus» de hace cuatro años en tierras de sus rivales de ayer. Pese a que Thierry Henry acabó con la sequía goleadora francesa en los Mundiales al cabo de 369 minutos, un gol de Park Ji-sung a diez minutos del final resucitó los fantasmas franceses de volver a quedarse fuera a las primeras de cambio, como en el Mundial de Corea-Japón 2002. Los «bleus» tendrán que estar pendientes de la calculadora en el último partido, en el que les resulta imprescindible una victoria sobre Togo y esperar a lo que suceda en el encuentro entre Suiza y Corea del Sur.

Francia no jugó bien y naufragó ante la pegajosa maraña defensiva de los soldados de Dick Advocaat, que asfixiaron la creación gala.

La «fantasía» que había pedido Raymond Domenech vino en forma de un rechace de Wiltord, que Henry aprovechó para adelantar a su equipo a los nueve minutos. El tanto dio a Francia la calma que no había tenido en todo el Mundial, pero no supo aprovechar el viento de popa para mejorar. Su juego fue pobre y falto de ambición, limitado a alguna jugada aislada, como el saque de córner de Zizou a la media hora que Vieira remató de fuerte cabezazo y Woon sacó en la línea de gol.

La propuesta gala era más ofensiva, pero la defensa surcoreana achicó bien los espacios. Malouda fue el mejor arma de los franceses, pero el lionés no conectó con Henry, el único punta del equipo. Tras el descanso, Domenech puso en pista a Ribery para tratar de reactivar su vanguardia, pero el joven marsellés no tuvo la chispa de otros partidos. Mejor le salió la jugada a Advocaat, que volvió a recurrir a los 72 minutos a Ahn Jung-hwang, el héroe de hace cuatro años, revulsivo del primer partido de los coreanos contra Togo.