Cassano castiga al Betis en su estreno y adelanta al Madrid

BETIS: Doblas; Varela, Juanito, Melli, Luis Fernández; Joaquín, Arzu, Rivera, Tardelli; Capi y Dani.
Cambios: Edu por Tardelli; Robert por Arzu y Fernando por Capi.

REAL MADRID: Diego López; Cicinho, Sergio Ramos, Iván Helguera, Raúl Bravo; Gravesen, Guti; Robinho, Baptista, Diogo, y Soldado.
Cambios: Iker Casillas por Diego López; Beckham por Cicinho y Cassano por Soldado.

Àrbitro: Bernardino González Vázquez (c.gallego). Mostró tarjeta amarilla a Sergio Ramos, Rivera, Guti, Raúl Bravo, Gravesen, Joaquín, Varela y Dani.

Gol:
0-1, minuto 65, Cassano.

El Real Madrid puso a su favor el pase a las semifinales de la Copa del Rey, al imponerse al Real Betis con gol del debutante Antonio Cassano, en un partido con poca brillantez y en el que los dos equipos evidenciaron encontrarse lejos de su mejor momento.

El partido fue el clásico de Copa, con más emoción, por la incertidumbre del marcador, que buen juego, mal aderezado con escasas ocasiones, tanto para béticos como para madridistas.

Los béticos pusieron en liza muchas ganas y voluntad pero con poco acierto ante un Real Madrid que se dejó toda en el banquillo a Zidane, Beckham y Cassano y eso, sobre todo en la creatividad, lo acusó sobre el césped.

Ya a los dos minutos tuvo el Betis la primera oportunidad ante el marco de Diego López, con falta lanzada por Joaquín a la que no llega bien Dani y Arzu, de espaldas, mandó el esférico por encima del travesaño madridista.

Diez minutos más tarde fue Dani el que lanzó desde lejos para que Diego López neutralizara en dos tiempos.

La última clara oportunidad de estos primeros 45 minutos la tuvo Capi, en la mejor jugada de los béticos, con volea del jugador que tampoco tuvo efectos en el marcador. Capi, a los 49 minutos, pudo inclinar la balanza para los béticos, en remate de cabeza desde cerca, y Cicinho, bajo los palos de Casillas, evitó el gol.

Sin embargo, en la primera ocasión en que el Madrid se acercó con peligro al marco de Doblas, en la segunda mitad, en un balón colgado sobre el área pequeña, el meta bético considera que es objeto de falta, la defensa se queda quieta y Cassano, desde cerca, mete el pie para poner el 0-1.