ALAIOR JOVENT (8+11+22+22): García (7), Tabu (8), Àlvarez (12), Murillo (4), Conde (8) -cinco inicial- Senderos (8), Sánchez (0), Pages (12) y Bolufer (4).

EIVISSA BÀSQUET (14+16+14+9): Pascual (2), Rosa (11), Moreno (5), De la Osa (5), Kelly (18) -cinco inicial- Pérez (0), Vázquez (4), Cela (1) y Ogilvie (7).

Àrbitros: Soler y Atienzar.

Incidencias: Polideportivo Municipal. 350 espectadores.

Àrea 11
Derrota del Eivissa Bàsquet ante un rival directo por eludir el descenso, el Alaior Jovent, que complica mucho las aspiraciones del equipo que dirige José Luis Oliete que en el último cuarto tiró por tierra el buen trabajo realizado en los treinta minutos anteriores.

El Eivissa Bàsquet comenzó muy entonado en defensa y el Alaior Opel Jovent muy precipitado lo que derivó en un 8-14 al final del primer cuarto.

En el segundo parcial los menorquines intensificaron la defensa realizando una presión en toda pista qu e les permitió meterse definitivamente en el partido (12-16 en el minuto 8).

Las rotaciones daban otro aire al Alaior Opel Jovent, que empezaba a correr gracias a Sánchez, pero dos triples consecutivos de Oglive mantenía las distanciass (12-22, máxima diferencia).

A continuación sucesión de balones perdidos por parte de ambos conjuntos y malos porcentajes de los locales que favorecía a los intereses pitiusos. Oliete estaba preocupado en anular a Juan Murillo que recibió un sinfín de ayudas interiores por parte de los defensores ibicencos y no desequilibraba como en otras ocasiones.

La buena defensa ibicenca era el principal argumento para explicar la diferencia (19-30 al descanso), además del colapso en ataque local y el nefasto 8/25 en tiros de campo del conjunto menorquín.

En la reanudación la intensidad local seguía sin ser la deseable y el talentoso Kelly (el mejor de su equipo) seguía mandando en la pintura. Dos triples de Conde apretaron la contienda (27-34) y el tramo final se encaraba con 41-44 en el marcador.

El último cuarto arrancó con un parcial de 13-0 para el Alaior que sentenció el choque y acabó con el buen trabajo de los pitiusos en los cuartos anteriores.