Jesús Gil, máximo accionista del Atlético de Madrid, falleció a los 71 años en la clínica Cemtro de Madrid donde se encontraba ingresado desde el pasado domingo tras sufrir un infarto cerebral. El también ex alcalde de Marbella fue ingresado el pasado día 9 en la Unidad de Cuidados Intensivos del centro hospitalario, donde fue trasladado desde la residencia Sanitaria Nuestra Señora del Prado de Talavera de la Reina (Toledo). El Atlético de Madrid, club del que era máximo accionista, decidió ayer suspender el partido previsto para hoy contra el Zaragoza en Madrid. El partido se disputará finalmente mañana domingo.

Jesús Gil se encontraba en su finca de Valdeolivas, en Avila, cuando se sintió indispuesto el pasado día 9. Desde entonces su estado de salud había empeorado hasta que en la tarde de ayer se produjo su fallecimiento.

La incertidumbre y las emociones se desataron en la expedición del equipo, pendiente de la evolución del accionista mayoritario de la entidad en los momentos previos al envite ante el Rácing de Santander y conmocionado ante la noticia que llegó procedente de Madrid. Gil ingresó de urgencia en el hospital Nuestra Señora del Prado de Talavera de la Reina a las 13:00 horas, donde se le hizo un primer examen y se le diagnosticó un accidente cerebro-vascular agudo (ACVA) isquémico (por trombosis) y donde, por deseo de su familia, se decidió su traslado a Madrid en una UVI móvil.

Primeros tratamientos
En el centro hospitalario de Talavera, en el que permaneció hasta poco antes de las 16.00 horas, Gil, de 71 años, recibió los primeros tratamientos y, tras estabilizarle, se le realizó un TAC craneal. El ex presidente atlético llegó a la clínica CEMTRO acompañado de su esposa, María de los Angeles Marín, y sus hijos.

El primer parte médico hospitalario confirmó que el dueño del Atlético de Madrid «sufrió un accidente cerebrovascular agudo, un infarto de la arteria cerebral media». El doctor Manuel Malillos explicó entonces que «el paciente está ingresado en la unidad de cuidados intensivos y su situación es estacionaria dentro de la gravedad propia de estos casos», el doctor Malillos pidió un plazo de 48 horas para aclarar si la vida de Jesús Gil corre peligro.

El historial médico de Jesús Gil y Gil, de 71 años, contemplaba una intervención quirúrgica en enero de 2003 en la que se le implantó un marcapasos en el hospital de La Luz de Madrid. Anteriormente, en febrero de 2000, tuvo que ser ingresado en la misma clínica, aquejado de una arritmia cardíaca, de la que se recuperó rápidamente.

El 7 de enero de 1999 se ordenó su ingreso en la prisión de Málaga, acusado junto a cinco personas más de cuatro delitos de malversación de caudales públicos y otro de falsedad en documento público, en relación con la contratación por el consistorio de la publicidad de las camisetas de los jugadores del club, y al tercer día de reclusión sufrió otra importante dolencia. Gil presentó un cuadro de hipertensión severa acompañado de cefalea y fibrilación auricular crónica, que le llevó al Hospital Clínico Universitario de Málaga. El 14 de enero fue puesto en libertad bajo fianza de cien millones de pesetas y, una vez efectuado el pago, permaneció hasta el día 19 en el hospital.

Gil había superado todo hasta que llegó este último ataque que le sorprendió en su finca cuando descansaba tranquilamente esperando conocer el resultado de su equipo en Santander. Ya en Madrid, el 11 de mayo la clínica Cemtro comenzó a informar a la opinión pública a través de diferentes partes médicos.

«En las últimas horas Jesús Gil ha presentado una disminución de consciencia acompañado de insuficiencia respiratoria, por lo que esta mañana se ha procedido a intubación orotraqueal y ventilación mecánica, lo que forma parte de la evolución natural de esta enfermedad» aseguró el director medico de la Clínica CEMTRO, Manuel Malillos en un comunicado leído a la prensa.

«En el momento actual el paciente está sedado con constantes vitales mantenidas dentro de la normalidad», añadió el doctor, que aseguró que por «expreso deseo de la familia».

Un día después, el 12 de mayo, se informó que el cuadro clínico de infarto cerebral masivo que padece Jesús Gil y Gil, ha experimentado, en las últimas horas, signos de empeoramiento progresivo.