La categoría de 500 c.c., la más esperada del fin de semana,
deparó muchas más sorpresas de las previstas, ya que si en la
primera salida delante estuvieron los favoritos, con excepción de
Valentino Rossi (Honda), que se vio forzado a remontar al salir
mal, aunque cuando se paró la carrera por la lluvia en la séptima
vuelta ya era tercero, Max Biaggi (Yamaha) comandaba la
clasificación, Barros le seguía y Capirossi marcaba muy de cerca a
Rossi.
Àlex Barros quería ganar y se colocó junto a su compañero de
equipo Loris Capirossi, ambos dejaron atrás a Kenny Roberts
(Suzuki), que iba con ellos e intentaron controlar a Norick Abe,
cuando este se marchaba en busca de la victoria, pero su ambición
acabó por los suelos, como la de Roberts y la de Rossi.
El triunfo fue para el más agresivo y efectivo bajo la lluvia,
Barros, al que siguieron los italianos Capirossi y Biaggi, quien
por escasamente tres décimas de segundo ganó al español Alex
Crivillé (Honda), que entró por delante de él en línea de meta.
Más claras estuvieron las cosas desde el principio en los 250
c.c. La carrera fue declarada en mojado desde el principio y quien
supo aguantar encima de la moto fue quien se adjudicó la victoria.
El triunfo resultó claro e inapelable para Harada, mientras el
líder del Mundial, que perdió ayer gran parte de su ventaja, el
también japonés Daijiro Katoh (Honda), hizo todo lo que pudo para
concluir décimo en un difícil fin de semana.
La «catástrofe» comenzó en los 125 c.c., ya que a poco de darse
la salida y cuando marchaban delante el japonés Youichi Ui (Derbi)
y el español Antonio Elías (Honda), comenzó a llover, se paró la
carrera y se aplazó. Al final ganó el japonés Noboru Ueda (Honda),
que se exhibió bajo la lluvia, seguido por Gino Borsoi (Aprilia) y
Manuel Poggiali (Gilera).
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