El FC Barcelona consiguió un cómodo triunfo (99-73) ante el Proaguas Costablanca en el Palau. El conjunto azulgrana, que nunca tuvo problemas en el marcador, se consolida con esta victoria al frente de la clasificación de la Liga ACB, con 21 triunfos y únicamente dos derrotas. Por su parte, el equipo de Alicante continúa en la última posición de la tabla, con sólo cinco victorias y ya 16 derrotas.

Esta victoria supone la décima consecutiva de los catalanes en la competición nacional, una racha impecable empañada por la nueva eliminación en Europa a manos del Benetton de Treviso en los octavos de final de la Euroliga. Sin embargo, los azulgrana parecen ya haber superado su fracaso europeo y este es el tercer triunfo, tras los conseguidos ante el Tau Cerámica en su cancha y el Pamesa en Valencia, desde entonces.

El conjunto azulgrana comenzó el encuentro de una forma fulgurante, con una férrea defensa, en la que destacaba la labor de Hawkins, Dueñas y Gasol, que le hacía distanciarse rápidamente en el marcador (12-3, min. 4) tras un triple lateral de Karnisovas. El Casademont Girona se sacó la espina que la derrota ante el Real Madrid le había clavado en la segunda parte de su doble visita a la capital, aunque el damnificado no fue el equipo blanco, sino el Estudiantes y su incipiente racha de victorias, cortada en seco por un conjunto que encontró la recompensa al esfuerzo desplegado dos días antes en la pista madridista sobre el parqué colegial.

La misma solidez que los gerundenses exhibieron en el pabellón de La Castellana para asfixiar a las huestes madridistas hasta el último segundo causó estragos en la calle Goya. Cuando el Estudiantes quiso darse cuenta de lo que estaba pasando ya era tarde para volver al partido, roto por una diferencia de diecinueve puntos (23-42 m.18) y completamente dominado por el equipo de Trifón Poch.