Cerca de 20 árbitros decidieron ayer no 'colgar el silbato' este fin de semana, aunque no descartan una huelga del colectivo si los clubes no cumplen con los acuerdos adoptados el pasado fin de semana con la Federación Balear de Baloncesto en relación al abono de las tasas de arbitraje, entre otros puntos.

Los clubes, que ya han comenzado a abonar las cantidades adeudadas, deben arbitrajes de la temporada anterior y de torneos tales como el Memorial David Booth. Así lo manifestó el delegado insular del Comité de Àrbitros de Baloncesto, Toni Marí, al término de una larga reunión de más de tres horas en la que también se reclamó a la delegación insular un trato equitativo por ser el colectivo arbitral un estamento más del baloncesto.

La autocrítica también estuvo presente en la reunión de ayer, que finalizó a las doce de la noche, ya que los colegiados acordaron realizar una reunión mensual que tendrá lugar los primeros miércoles de cada mes, con el fin de garantizar un conocimiento más exacto del curso de la competición y favorecer un clima de cohesión al colectivo. También, se acordó atender a las designaciones.