Algunos de los grandes equipos inicialmente habían reservado
habitaciones para una noche, pero ante la suspensión de la carrera
y el alargamiento de la estancia en la capital nigerina, los
hoteles se frotan las manos.
«Nuestras 240 camas están ocupadas. El 95 por ciento de la gente
aquí alojada pertenece a la caravana del Dakar y se quedarán cinco
noches en lugar de una», asegura el responsable de un hotel de la
capital de Níger.
Al igual que los hoteleros, los taxistas están haciendo un gran
negocio. Muchos de los pilotos deciden salir de excursión y para
desplazarse por Niamey utilizan los taxis locales, que también han
doblado sus tarifas.
Los bares y los restaurantes se están beneficiando de la
suspensión de la carrera. El pasado miércoles, la mayoría de los
locales de la calle principal de Niamey se quedaron sin existencias
ante la masiva afluencia de pilotos.
Pequeños comerciantes y vendedores de cigarrillos hacen su
agosto, ya que los pilotos que salen de excursión por el centro de
Niamey aprovechan para comprar recuerdos y regalos para sus
familiares.
Sin comentarios
Para comentar es necesario estar registrado en Periódico de Ibiza y Formentera
De momento no hay comentarios.