MARCO TORRES La mayor parte de los servicios que a puesto a disposición del público el polideportivo de Es Raspallar ya se encuentran prácticamente llenos, tan sólo una semana después de la admisión de inscripciones. Después de que el Consell aprobase en pleno las tarifas de Es Raspallar, el lunes día 27 de septiembre se empezaron a admitir las primeras inscripciones; una semana después hay pocas cosas a las que apuntarse. El interés despertado por la nueva instalación ha sido tal que las 300 plazas previstas para nado libre, uno de los servicios más solicitados con un horario de 8 a 22 horas cinco días a la semana y sábados por la tarde, ya se han cubierto al cien por cien. En cuanto a las clases de natación con monitor, hay unos 500 inscritos, aproximadamente el 90 por ciento de lo disponible, aquí se incluyen 60 niños pequeños y bebes y los grupos de adultos. Para los colegios ya se han reservado horarios y plazas para 700 alumnos, lleno total.

En las clases de gimnasia de mantenimiento y musculación hay 104 inscritos lo que supone un grupo considerable. Sin embargo, los dos servicios menos solicitados son los de sauna y jacuzzi, que tan sólo cuentan con 60 personas semanales, cuando son capaces de absorber una afluencia de 70 diarias.

Esta situación, según Santiago Camarero, coordinador de los servicios, «se debe mucho a que se trata del primer mes». «Ahora la gente está muy interesada y se apuntan todos, pero al finalizar el mes algunos se darán de baja y podremos admitir a más gente. estamos al 87 por ciento de nuestra capacidad», aclaró Camarero. Los responsables del Raspallar dirigidos por el gerente, Toni Roig, están empezando a utilizar las listas de espera de algunos de los servicios, dado que después de dos días de funcionamiento se han hecho ciertos ajustes que permiten ir encajando más usuarios.