FELIPE RECUERO-ZARAGOZA El guipuzcoano Abraham Olano, del equipo ONCE DB, ha sido el gran protagonista de la primera parte de la Vuelta 99 al salir airoso de los primeros envites serios de montaña, especialmente del Alto de El Angliru y exhibirse en su terreno, la contrarreloj individual de Salamanca.

Olano, que defiende el título logrado el pasado año, se ha convertido en la figura indiscutible de la presente edición, pues sus más directos rivales sufrieron un pequeño varapalo en la contrarreloj de Salamanca y, después, en la montaña, en la considerada jornada reina con final en el Angliru, realizó una ascensión espectacular consolidando el liderato sin perder apenas tiempo con los grandes escaladores.

Una jornada espectacular por la montaña, por las adversas condiciones climatológicas, por las caídas y por la exhibición de algunos los escaladores -Tonkov, Heras y Jiménez, a la postre vencedor- y la magnifica ascensión de Abraham Olano, un corredor al que, generalmente, se le atraganta la montaña. Lo peor de esa jornada fueron las caídas, pues hubo cerca de cincuenta y entre los damnificados mención especial para el aragonés Fernando Escartín (Kelme CB), que bajando la Cobertoria sufría una espectacular caída terminando en un hospital de Mieres.

Ese accidente ha puesto fin a la temporada del bravo corredor oscense, ya que sufre un fuerte golpe en el pecho y tiene tres costillas rotas. La ausencia de Escartín ha dejado un poco huérfana a la Vuelta 99 en la que, además del mencionado Olano están destacando Jan Ullrich y Pavel Tonkov, dos corredores que decían venir a preparar el mundial y lo cierto es que no están escatimando esfuerzos.