El Campus d'Estiu, que organiza el CH Puig d'en Valls ha llegado a
su quinta edición, y con ella, la consolidación de una escuela que
apuesta por el trabajo con la base y el reciclaje de los
entrenadores y que este año se celebrará del 6 al 12 de septiembre.
Con la aportación económica y de material del Consell Insular,
donde fue presentado ayer, y del Ayuntamiento de Santa Eulària,
este campus ocupa un espacio vital en las actividades de verano de
un deporte que cada vez cuenta con más aficionados.
Varios son los factores que hacen de este encuentro de
profesores y aprendices, un punto clave en la evolución del
balonmano pitiuso y entre ellos están los éxitos a nivel balear,
sobre todo en categoría femenina; el trabajo que los distintos
clubs e instituciones llevan a cabo con la base, y la presencia,
desde hace tres años, del seleccionador nacional juvenil, Manolo
Laguna.
La consellera d'Esports del Consell Insular d'Eivissa i
Formentera, institución que aporta 225.000 pesetas al presupuesto
total del campus que asciende a 780.000 pesetas, Fanny Tur,
presentó ayer la quinta edición del mismo, confiando en que «se
mantenga en años posteriores y que a ser posible mejore». Por su
parte, Joaquín Ripoll, directivo del Puig d'en Valls, afirmó que el
campus «funciona, ya que de lo contrario se habría modificado su
estructura original».
El presupuesto lo completan 100.000 pesetas del Ayuntamiento de
Santa Eulària, además de aportaciones privadas y la del propio club
organizador. La inscripción, que en esta edición ha sido ampliada a
los benjamines, ya está abierta y se podrá formalizar hasta el 4
del mes que viene. 2.000 pesetas costará la cuota para los
benjamines, alevines e infantiles, mientras que los cadetes y
juveniles (categoría incorporada el año pasado) deberán pagar 3.000
pesetas.
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