Los propietarios del establecimiento fueron multados con 60.000 euros y se procedió al cierre del local. Según las investigaciones de la policía, el establecimiento se usaba para organizar fiestas ‘after' sin ningún tipo de permiso y se realizaron varias maniobras para evitar ser descubiertos como poner vigilantes en el exterior o impedir el paso de los agentes.
El local fue denunciado en diversas ocasiones por los vecinos debido a los ruidos y molestias causados por la actividad desarrollada en dicho establecimiento.
Las normas subsidiarias señalan que los usos de discoteca y sala de fiestas no están permitidos en ese local, pues no existe ninguna licencia de este tipo en vigor y al dificultar la labor inspectora de los agentes se considera que se cometió una falta muy grave.
Además el consistorio remitió a la Fiscalía el expediente por la comisión de un posible delito de desobediencia a la autoridad puesto que celebraron una fiesta cuando el local ya estaba precintado.
Además, el ayuntamienot aprobó dos sanciones de 3.000 euros cada una a dos establecimientos ubicados en el casco urbano de Santa Elulària y 12.000 euros a un hotel de es Canar.
Todos estos expedientes forman parte de una campaña de control y lucha contra el ruido en el municipio de Santa Eulària que trabaja para fortalecer un modelo turístico de calidad que garantice la convivencia entre la actividad turística y el descanso y tranquilidad de los residentes y vecinos.
2 comentarios
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Jajaj es increíble: en santa eulalia algunos se quejan del Ayuntamiento, y el resto de gente de ibiza deseando ser como Santa eulalia. Aquí la cosa es quejarse.
Y ¿para cuando la misma medicina para playa den BOssa???