Las lluvias registradas ayer en Eivissa dejaron un reguero de
accidentes a lo largo y ancho de la isla, aunque, afortunadamente,
ninguno de ellos revistió excesiva gravedad. Prácticamente todos
los siniestros estuvieron provocados por deslizamientos de los
vehículos sobre el asfalto, provocados por la fina película de agua
y barro que se formó en las carreteras.
Sobre las 09'30 horas, en Sant Josep, una joven de unos treinta
años, cuyas iniciales son F.B.M, resultó herida leve al colisionar
con su Opel Corsa, matrícula A-0756-BK, contra una furgoneta
Mitsubischi, matrícula IB-2741-DN, en la curva en la que se
encuentra el desvío hacia Benimussa. La joven, que se quejaba de
dolores en la espalda y en el pecho, fue trasladada por Ambulancias
Ibiza hasta la Policlínica Nuestra Señora del Rosario.
En Sant Agustí, junto a los colegios Es Vedrà, un conductor
perdió el control de su vehículo tras golpear el bajo del mismo con
una piedra, dejando una gran mancha de aceite sobre la carretera
que provocó que otro turismo se saliera de la vía. Los bomberos se
desplazaron hasta el lugar para limpiar la zona.
También en Sant Josep, un Fiat Punto ocupado por dos personas
volcaba por completo tras derrapar en una curva sobre las 11'30
horas. Sus dos ocupantes resultaron ilesos, aunque la presencia del
vehículo sobre la carretera dificultó la circulación durante una
media hora. Ya en Eivissa, una furgoneta patinó sobre el asfalto
cerca de la rotonda de la avenida de Sant Joan, en el primer
cinturón de ronda, quedando semivolcada sobre una acequia. Pocas
horas después, una persona fue atropellada en el paseo Vara de Rey
sin que al cierre de esta edición se conociera su estado.
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