Este fin de semana se celebra la Diada de Vela Latina de Cala Gamba, en Palma de Mallorca. Un prestigioso encuentro que cumple 25 años de historia con la presentación del nuevo EcoMuseu Marítim, la llegada del Sant Isidre, una barca de bou de 1925 que sirvió en la Armada republicana en la Guerra Civil, la participación por primera vez de un bote de vela latina canario, y como representación ibicenca, la bruixa Javi.

['Javi', el único llaüt de tipo bruixa de Ibiza, en imágenes.]

Una auténtica joya que este mismo viernes pone rumbo a la isla vecina desde Ibiza comandada por dos trabajadores del Ayuntamiento de Santa Eulària, Toni Tur Sendic de Cultura y Javi Gómez del departamento de Medio Ambiente. No en vano, ellos son los dos valientes que se han atrevido a restaurar esta embarcación construida en 1979 y que corría el riesgo de desaparecer.

Según explicaron este jueves ambos a Periódico de Ibiza y Formentera el inicio de esta aventura se remonta unos años atrás. Se trata de un velero que había construido en un lugar cerca de la cantera de s’Argentera en Sant Carles en 1979 uno de los últimos mestres d’aixa que quedaban en la isla, Jaume d’en Jordi, y fue pasando de mano en mano hasta que su último dueño llamó al actual técnico de cultura de Santa Eulària para ver si quería hacerse cargo de él cuando lo iba a cambiar por otro más nuevo y moderno.

«Fue una sorpresa y todo se desarrolló muy rápido, mediante una llamada de teléfono de un amigo mío cuando lo acababa de sacar del agua en Pou des Lleó y lo tenía cargado en un camión para abandonarlo en una finca y como a mí me encantan estas cosas no pude negarme», bromeó este jueves Sendic.

El caso es que acabó en sus manos en muy mal estado y casi sin remedio. Por ello no dudó en pedir colaboración a su fiel amigo Javi Gómez, con el que también colabora en la restauración de un barco de mayores dimensiones llamado La reina del mar, y pedir asesoramiento al constructor original. «Cuando me encontré como estaba el barco me di cuenta que realmente solo podía ayudarme quien lo había construido y quien además me había enseñado a mi a ser mestre d’aixa con 18 años y con el que construí mi primer pequeño llaüt y para mi sorpresa fue él el que me animó a crear otro gemelo», explicó Sendic.

Fue entonces cuando tanto él como Gómez decidieron decantarse por un llaüt con vela mayor guaira y foque, aparejado de bruixa, de 4,70 metros de eslora. Una embarcación que, según la Enciclòpedia de Eivissa i Formentera «es un tipo de barco menor que empezó a hacerse popular durante los años cuarenta del pasado siglo y que se caracterizaba por su vela de perxeta o cangreja con un pie de gallo al pico y que, como distintivo, lleva el perfil de una bruja en la vela».

Trabajo totalmente artesanal

Como es habitual en todos los trabajos que hacen tanto Sendic como Gómez el proceso fue totalmente artesanal prolongándose durante unos cuatro meses sacando tiempo de donde podían.

Según explicó con una sonrisa el técnico de Medio Ambiente de Santa Eulària, las velas las hicieron en algodón y loneta en una máquina de coser antigua de más de cien años que era propiedad de la abuela de Sendic. Además, han empleado todo tipo de maderas tradicionales, estopa para calafatear las juntas del barco y sellarlas para que no entre el agua, aceite de linaza y clavos de cobre o hierro galvanizado. «En nuestra manera de trabajar es innegociable seguir las indicaciones de los que vinieron antes de nosotros para intentar mantener vivas las tradiciones de nuestros antepasados y por eso no nos importa que el proceso nos pueda llevar mucho más tiempo que si lo hiciéramos de otra manera», confirmó Javi Gómez.

Finalmente, el resultado a tanto esfuerzo y horas de trabajo ha merecido la pena ya que el Javi es actualmente el único llaüt de tipo bruixa que se puede ver en aguas de Ibiza. De hecho, según los restauradores, hasta entonces solo se sabía de estas embarcaciones por algunas fotografías de las regatas que organizaba en los años 50 el Club Náutico de Ibiza y por unos planos a escala hechos por Joan Tur Serra Guardiola, un mestre d’aixa que nació en el barrio de la Marina en 1901, muriendo en 1977, y conocido por ser el constructor en 1962 de un pailebot o goleta pequeña sin gavias conocido como la Joven Teresa.

Proyectos futuros

Desde que lo restauraron, tanto Sendic como Javi Gómez han salido a navegar con Javi en varias ocasiones. Tanto es así que algunas de las fotos que se han hecho han servido para ilustrar el cartel de la Diada de Vela Latina de Cala Gamba de este fin de semana.

Además, son muy activos mostrándolo al público junto a otro tipo de materiales, instrumentos y aparejos tradicionales del mar en ferias como la del Gerret que organizaba hasta la llegada de la pandemia el Ayuntamiento de Santa Eulària en el centro del pueblo.

Incluso, la intención de ambos es recuperar en el mes de octubre un taller de restauración y mantenimiento de chalanas que hacían a través de la Associació Marítima- Cultural d’Eivissa i Formentera.