Si las luces que decoran las calles son cada año un claro aviso de
la llegada de la Navidad, empieza a ocurrir lo mismo con la pista
de hielo, un elemento que además, aporta una importante dosis de
ambiente navideño a cualquier ciudad. Desde ayer ya tiene las
puertas abiertas la pista de Eivissa, una iniciativa que partió del
Ayuntamiento de ese municipio y que se repite tras el éxito
conseguido en las pasadas fiestas. Mientras el alcalde de Eivissa,
Xico Tarrés, y el concejal d'Esports, Roque López, se encargaban de
la inauguración oficial, muchos curiosos se acercaban al parking
disuasorio situado junto a la central eléctrica de GESA.
Aunque algunos detalles se mantienen (el precio continuará
siendo de 6 euros la hora, patines incluidos), existen varias
mejoras que se pueden apreciar a simple vista. En el bar se han
instalado varias estufas para evitar que, como ocurrió el año
pasado, algunos padres se queden 'helados' mientras esperaban a sus
hijos; también ha aumentado el tamaño de la pista, así como el
tiempo de apertura de la misma, ya que en un principio está
previsto que se mantenga durante 60 días. La empresa Sport Big
House se ha ocupado de su puesta en marcha y se hará cargo tanto de
los gastos, que ascienden a 180.300 euros, como de los
beneficios.
Además, la discoteca El Divino se ha ocupado del diseño de la
cafetería. Respecto al cambio de ubicación, el alcalde de Eivissa
aludió a la necesidad de activar los aparcamientos disuasorios y
puso de relevancia algunas de las ventajas del nuevo emplazamiento.
«Está cerca de la ciudad y las pocas molestias que hubiera podido
causar el año pasado, ahora se evitarán», apuntó.
Sara Yturriaga
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