Más tranquilos

Poco después de las diez de la mañana los nadadores se congregaban en la playa de es Ca Marí para iniciar el traslado de los relevistas, el equipaje y la intendencia a las embarcaciones de apoyo, en especial la cedida de forma altruista por Trasmapi, que ejerce las funciones de enlace, centro de control y obligado punto de reposo de los nadadores.

El casi centenar y medio de participantes que habían disfrutado de una abundantísima torrada benéfica la noche anterior en el instituto Marc Ferrer se lanzaron con ímpetu al agua para afrontar una etapa que partiendo de la zona media de la playa de Migjorn debía conducirles hasta el faro de es Cap de Barbaria para a continuación iniciar un giro hacia el noroeste bordeando los acantilados para llegar a la altura de Cala Saona, de la torre de sa Punta de sa Gavina y finalmente, tras doblar Punta Pedrera, enfilar hacia el puerto de la Savina, a donde llegaron en embarcación debido a que con antelación se había decidido no llegar a la playa del Cavall d'en Borràs. El motivo de este cambio estribaba en las dificultades logísticas y, sobre todo, por el posible peligro para los nadadores, dado el volumen de embarcaciones y bañistas que a esas horas "las cinco de la tarde" se hallan en dicho lugar.

La salida de la tercera y última etapa, que tendrá lugar hoy domingo, se realizará desde Cavall d'en Borràs, pero sólo un número limitado de nadadores para impedir una avalancha de personas, equipamientos y enseres en una zona protegida. La llegada está prevista alrededor de las dos y media de la tarde en la playa de es Pujols, donde se entregarán los trofeos y diplomas acreditativos a todos los participantes.