La Asociación de Empresarios de la Calle Ramón y Cajal de Sant
Antoni, adscrita a la patronal Pimeef, ha presentado ante el
Ayuntamiento de Sant Antoni y el departamento de carreteras del
Consell Insular d'Eivissa i Formentera, sendos escritos planteando
la situación actual de la calle y proponiendo diversas soluciones.
Los afectados explican que la calle «dejó de ser hace tiempo una
carretera con destino a Santa Agnès para ser una de las principales
calles del núcleo urbano de Sant Antoni con una gran afluencia de
vehículos».
El aumento del tránsito, en lugar de ser un beneficio para
residentes empresarios y, sobre todo, para los turistas «ha
resultado un perjuicio debido a la estrechez de las aceras, la
escasez de pasos de cebra, el doble sentido de circulación en una
carretera demasiado estrecha, la falta de aparcamientos, la
abundancia de postes de luz y teléfono, así como de papeleras mal
situadas que dificultan el paso de peatones por lo angosto de las
aceras de esta carretera. La asociación ha reiterado en diversas
ocasiones la necesidad de que la vía sea asumida por el
Consistorio, una vez entre en funcionamiento la Ronda Norte.
No obstante, la asociación ha solicitado al Consell (que cuenta
con las competencias de carreteras desde este año) y al
Ayuntamiento, en las cuestiones de su competencia, que acometan
diversas actuaciones lo más rápidamente posible. Entre las reformas
precisas está la de aumentar los pasos de peatones en la calle
(sólo hay dos), la ampliación de las aceras, establecer el primer
tramo como de único sentido, acometer la señalización de tráfico de
la calle, buscar ubicaciones alternativas a los autobuses
turísticos, abrir nuevos accesos para descongestionar la calle,
soterrar líneas aéreas y subvencionar indicadores de
publicidad.
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