El presidente del Govern de les Illes Balears, Francesc Antich, afirmó el pasado domingo en Formentera que «una posibilidad de forzar una solución política y rápida al deslinde de Formentera sería no presentar recurso de casación ante el Tribunal Supremo». Antich explicó que actualmente el equipo jurídico del Govern está preparando el recurso que «anunciamos a la Audiencia Nacional presentaríamos ante el Supremo, pero por otra parte no descartamos la opción de renunciar al recurso ya que podría ser una postura más efectiva, ya que de esta manera obligaría a que desde Madrid se actúe para solucionar el problema del deslinde a través de acciones políticas y no judiciales».

Según Antich, y tal y como declaró recientemente en Formentera, los juristas del Govern «ven muy difícil que prospere el recurso de casación contra la sentencia de la Audiencia Nacional» por la forma en la que el entonces presidente de la Comunitat, Jaume Matas recurrió el deslinde, «de forma demasiado genérica» motivo por el que la Audiencia lo desestimó.

En este sentido, desde el Govern se piensa que interponer un recurso de casación con pocas posibilidades de prosperar, «lo único que haría "dijo Antich-, sería alargar innecesariamente el proceso e impedir una solución política que es la que creemos más ajustada a la situación». Caso de interponer recurso, desde el ministerio de Medio Ambiente no se podría actuar ya que el asunto estaría sub judice, por lo que «hemos de valorar si lo más oportuno es interponer recurso o, por el contrario y aunque parezca paradójico, abstenernos de hacerlo para forzar una solución política».

Estas declaraciones del presidente Antich las hizo después del acto de inauguración de la nueva sede de la Agrupación Socialista de Formentera, acto al que también asistieron la presidenta del Consell d'Eivissa y Formentera, Pilar Costa, los consellers Fanny Tur, Sofía Hernanz, Santiago Ferrer y Josep Marí Ribas, así como el alcalde Eivissa, Xicu Tarrés, y el de Formentera, Isidor Torres.