Manualidades festivas

A pesar de que el grupo infantil de las fallas cuenta con una quincena de asiduos, ayer fueron menos los que se reunieron en el centro de operaciones para continuar con un proceso de trabajo artesanal en el que participa algún que otro mayor para recordar viejos tiempos, concretamente las clases de dibujo de la etapa escolar.

«Este año la falla infantil llevará otra distribución, será más voluminosa y más alta. Sus dimensiones serán aproximadamente tres metros de alto por unos 2'70 de ancho y 2'60 de fondo», detalló Víctor Uriarte, presidente de la Asociación de Falleros de Sant Antoni.La de este año es la segunda falla menor que se realiza en Sant Antoni y, al igual que la falla grande, arderá el 24 de marzo, justo una hora antes, formando parte del preámbulo de la gran fiesta de la comunidad de valencianos de la isla.

Ayer los chavales dedicaron más de dos horas a pintar con preparados acrílicos y de aceite los ninots de manera minuciosa y siguiendo unas pautas marcadas por los mayores. Entre los falleros infantiles se encontraba Óscar Montes, presidente de la Falla Infantil y portavoz de este colectivo, dando los últimos retoques a una de las figuras con forma de conejo. «Son figuras hechas con cola de empapelar, papel de periódico y unos moldes de cartón», explicó Perla, la fallera mayor infantil que ayer coloreaba la figura de un duendecillo.

A diferencia de la falla de 2001 la de este año cuenta con una serie de personajes que han sido elaborados en Valencia, en el taller del maestro fallero que está trabajando en la falla grande. «Desde el taller de Federico Contreras en Benifaraig se nos han enviado las piezas obtenidas de los moldes y nosotros las hemos grapado, les hemos dado una cola para sellarlas bien y ahora las pintamos», explicó orgulloso el presidente de los falleros.