Joan Buades hablando con Santiago Ferrer.

El equipo de gobierno del Consell Insular no lo tiene fácil para llegar a un acuerdo con la oposición para aprobar las cuentas de 2002, rechazadas en el pleno del 21 de diciembre. Tanto el conseller del grupo mixto, Joan Buades, como el portavoz del Partido Popular en el Consell, Pere Palau, criticaron ayer la incapacidad de negociar del Pacte para llevar adelante las cuentas del 2002.

El conseller ecologista, Joan Buades, advirtió ayer de que si no hay un pacto en los presupuestos «se propondrá la modificación de los presupuestos prorrogados para incrementar la partida de servicios sociales». «Esperamos contar con su voto, aunque siga rateando después de las fiestas y viajes del equipo de gobierno», añadió. Tras el último pleno, aún no se ha producido una reunión. Sólo la coordinadora de Els Verds, Marta Roldán, ha recibido un correo electrónico de Santiago Ferrer. «Estamos pendientes de que nos convoquen», dijo Buades. El conseller no dudó en establecer una comparación entre estas negociaciones en el Consell con las mantenidas con el presidente del Govern. «Con Francesc Antich nos hemos reunido, estuvimos negociando y nos hemos puesto de acuerdo», recordó.

Buades reiteró que la inversión en bienestar social baja en los presupuestos de 2002. Según Els Verds, en la liquidación de los presupuestos de 2001 «se han ahorrado 261 millones de pesetas», cuando se contemplan sólo 113 millones de pesetas (679.143 euros) en los presupuestos de 2002. Dentro de los proyectos figura el centro de rehabilitación de salud mental. Una iniciativa que financia el Govern en el caso de Menorca. «Palma paga 166 millones en Menorca para hacer una comunidad de enfermos mentales, al margen de la ley de transferencias y Hernanz pretende que el Consell pague íntegramente», señaló. Buades recordó que la Asociación de Familiares de Enfermos Mentales pidió ocho millones de pesetas para un centro psicoterapeútico, pero aún no tienen respuesta. «Hablamos de ocho millones que se pidieron en septiembre, cuando a la consellera le sobraban 261 millones en noviembre», precisó.