El Ayuntamiento de Eivissa incluirá en los presupuestos del próximo
año una reforma total de la calle Pere Francès con el objetivo de
mejorar su aspecto y, sobre todo, incrementar la comodidad del
peatón, que actualmente tiene que sortear farolas y árboles a lo
largo de unas aceras llamativamente estrechas.
El concejal de Obras del Consistorio, Antoni Roldán, confirmó
que se trata de que haya «menos calle para los coches y más calle
para los peatones», motivo por el cual se ha decidido eliminar todo
el espacio que actualmente se utiliza para estacionar vehículos a
ambos lados de la calle. Ese espacio se ocupará con la construcción
de aceras mucho más anchas, el máximo que permita la calle, que
continuará teniendo un único carril de circulación. Como se está
haciendo en el resto de la ciudad, se colocará el mismo modelo de
baldosa elegido hace ya unos años para unificar todas las calles y
paseos del municipio de Eivissa.
La reforma también incluye la colocación de nuevo mobiliario
urbano y mejoras en la iluminación y en la red de aguas. El
proyecto para este «cambio total» ya está terminado, afirmó Roldán,
y por tanto sólo a la espera de que se aprueben los presupuestos
del próximo año y, con su entrada en vigor, las obras puedan salir
a contratación.
Este proyecto coincide con otras reformas previstas por el
Consistorio para esta calle del barrio de es Pratet. Además de la
instalación de red separativa de aguas pluviales y fecales, el
Consistorio se ha planteado la posibilidad de instalar en esta zona
contenedores de basura subterráneos, como ya informó recientemente
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