La profesión de guía turístico ha evolucionado como lo ha hecho la industria. Hoy la touroperación sigue siendo muy relevante en números absolutos, pero cada vez son más importantes los viajes directos. Los clientes buscan experiencias únicas y personalizar el viaje en función de su disponibilidad, presupuestos y gustos. Las nuevas tecnologías han transformado la industria del travel proporcionando inmediatez, información e interactuación en redes sociales. Los visitantes han pasado de querer verlo a querer vivirlo. Y todo ello ha cambiado la profesión de guía.
Muchos profesionales siguen trabajando en las excursiones tradicionales que organizan los touroperadores, pero han cambiado sus explicaciones, hoy más enfocadas a más anécdotas y leyendas y menos históricas, para llamar la atención del oyente y contar lo que no sale en las guías. A su vez, crece la demanda de visitas tematizadas y a medida.
A día de hoy, los touroperadores y las agencias locales son los principales clientes de los guías y cada empresa tiene su propia oferta de excursiones.
VISITAS TRADICIONALES. Los turistas quedan impresionados por la Serra de Tramuntana. Ya sea sa Calobra o Formentor, las visitas tradicionales siguen teniendo su público.
La excursión más demandada en Mallorca es la ‘Vuelta isla'. Consiste en bajar en autobús hasta la Calobra y continuar en barco hasta el Port de Sóller. Sigue en tranvía hasta Sóller, y de ahí con el tren hasta Palma. “A pesar de que se ha desprestigiado un poco en los últimos años, continúa siendo la más vendida”, explica Susana de Cortada, presidenta del Col·legi Oficial de Guies Turístics de Balears.
Los pueblos con encanto como Valldemossa, Deià o Sineu también gozan de una excelente popularidad. Al igual que las cuevas. El enoturismo tiene su importancia, pero no es tan masivo. La visita a bodegas suele funcionar con grupos interesados que reservan previamente, ya que encarece el precio de la excursión.
Palma se ha convertido en una parada imprescindible para la mayoría de visitantes, que reservan un día o dos de sus vacaciones para pasear por la capital. La principal atracción de Ciutat, de acuerdo con los profesionales, es la Seu. Sin embargo, cada vez son más habituales las rutas temáticas especializadas en la Palma modernista, los patios, el Casal Solleric, el call jueu, Es Baluard, las leyendas...
En los años previos a la crisis las instituciones públicas ofrecían diferentes rutas por Palma con guía en varios idiomas de manera periódica. Sin embargo, hoy toda la oferta es privada y se ha orientado tanto a turistas como a residentes. Un día cualquiera pueden pasear por Palma 30 grupos grandes de turistas con su guía, además de profesionales que van con dos o tres personas, indican desde el Colegio.
Asimismo, la ley permite que un guía turístico de Balears pueda llevar a 70 turistas. Una cifra que entra dentro de toda la lógica al pensar en autocares, pero que muchos profesionales ven excesivo en el casco histórico de Palma.
REGULACIÓN. La actividad de guía turístico está regulada por el decreto 20/2015, de 17 de abril, que desarrolla la Ley del Turismo. Se considera que las visitas y excursiones a bienes de interés cultural y bienes catalogados del patrimonio historicoartístico y cultural, además de los parques nacionales y naturales, necesitan la actuación de un guía turístico debidamente acreditado. En cambio, el simple acompañamiento y traslado sin dar información no precisa de guía.
Los requisitos para conseguir la habilitación como guía son tener un grado, diplomatura o ciclo formativo superior y realizar una prueba de acreditación de conocimientos -en función de lo que exija cada Consell Insular-. Es necesario saber de patrimonio cultural y natural y acreditar un nivel mínimo de B2 de cuatro idiomas: castellano, catalán, inglés y otra lengua que el guía puede escoger. En cambio, con el Grado en Turismo, diplomatura en actividades turísticas y técnico superior en comercialización turística o asistencia turística se accede a la habilitación directamente con el título.
Los guías de Menorca y Eivissa están regulados por el Consell Insular mientras que Mallorca sigue dependiendo de la Conselleria de Turisme, ya que las competencias de Promoción se han traspasado pero no las de ordenación.
La habilitación permite conseguir el carné de guía turístico, que todos los profesionales deben llevar en un lugar visible durante las excursiones.
Desde hace años, la regulación de los guías turísticos en Mallorca arrastra problemas. Debido a motivos legales y de medios, no se realizan pruebas de habilitación de guías en la isla desde el año 2005, a pesar de que la ley exige que se convoquen cada año. Según explica De Cortada, en los últimos años se ha intentado esquivar este impasse con un DRIAT (Declaración Responsable de Inicio de Actividad), de manera que los guías firman una declaración jurada indicando que poseen la titulación necesaria. Sin embargo, para el Col·legi Oficial, la única solución es que convoquen los exámenes porque de lo contrario es “regalar la acreditación”. El año pasado a iniciativa de la Conselleria se organizó un curso para habilitar guías en la primera fase -conocimientos sobre patrimonio-, pero no ha tenido continuidad con la acreditación de idiomas.
En cambio, en Eivissa y Menorca se han realizado pruebas recientemente.
El Govern balear ha dado 880 acreditaciones desde 1990, pero desconoce si estos guías están ejerciendo o no. Además, ha concedido trece autorizaciones a personas de otros países de la Unión Europea que han pedido ejercer de guías en Balears este 2018. Según la normativa actual pueden hacerlo un máximo de cuarenta días al año. También los guías habilitados por otras comunidades autónomas pueden ejercer en las Islas sin necesidad de registrarse en la Conselleria.
Además de estar habilitados, los guías tienen la obligación de colegiarse. Según los datos del Col·legi Oficial, en Mallorca hay 173 guías colegiados, siete en Menorca y 24 en Eivissa, además de 45 guías colegiados no ejercientes, la mayoría retirados.