Marc Tur posa con su medalla de bronce de los 10.000 metros marcha del Campeonato de España de Verano, ayer en La Nucía (Alicante).

Marc Tur Picó suma y sigue. El atleta ibicenco se subió ayer al tercer cajón del podio en la prueba de los 10.000 metros marcha del Campeonato de España absoluto de verano. El corredor, especialista en distancias mayores, de la Peña Deportiva consiguió así su primera medalla en esta modalidad.

La carrera comenzó como un tiro. Álvaro Martín, Miguel Ángel López y Diego García imprimieron un ritmo muy alto desde el principio, lo que les hizo distanciarse ya en la primera de las 25 vueltas que había que dar al estadio de La Nucía, en Alicante. El pitiuso se quedaba rezagado en la cuarta plaza, distanciado al mismo tiempo de todos los demás, como una isla en pleno mar.

A su ritmo, y sin olvidar que se tomaba esto como preparación para el Mundial de Doha del próximo mes, se centró en lo suyo y poco a poco fue acercándose a García, que no pudo seguir la estela del tren de cabeza. Mediada la prueba, Marc Tur dio caza al subcampeón de Europa de los 20 kilómetros marcha del año pasado y ya no hubo manera de sacarle del podio.

Delante, Martín seguía dominando la prueba y se acabó haciendo con la victoria con un tiempo de 39'33'', su mejor marca de la temporada. López cruzó la meta cerca de él, a menos de dos segundos. El peñista finalizó tercero con un registro de 41'55'', con una ventaja de más de medio minuto sobre Diego García (42'31'').

El pitiuso no ocultó su alegría al completar la prueba. Su cara era el vivo ejemplo de la felicidad. Por eso, no es de extrañar que dijera que este bronce le «sabe a oro». «La verdad es que me he encontrado bastante bien. He intentado mantener la cuarta posición y, luego, Diego no ha aguantado el rimo de cabeza y le ha pasado factura. Me he podido aprovechar de esta situación y hacerme con la tercera plaza. Me sabe a oro por el hecho de que veía difícil acabar en el podio», explicó.

El ibicenco, eso sí, confesó que tenía ciertas esperanzas en conseguir un metal en el día de ayer. «Tal y como venía entrenando, tenía ganas e ilusión. Me veía bastante cerca de las medallas. Lo veía muy difícil, pero no imposible», indicó.

Ahora, el pitiuso se marchará a Almería para preparar allí durante este mes su participación en el Campeonato del Mundo de Doha: «Será de 50 kilómetros y no tiene nada que ver con un 10. Aquí me fue muy bien pero allí me puede salir cualquier otra cosa. Estoy con ganas y confianza porque la temporada está yendo muy bien y cada vez mejor incluso».