Los dos técnicos coincidieron en destacar que la ventaja cobrada por el Puig d'en Valls deja la presión de la eliminatoria "semifinal del play off por el ascenso" sobre la espalda de las madrileñas. «Lo importante ahora es que tenemos una ventaja que nos permite cometer un error; ahora habrá que analizar el partido del próximo viernes donde será importante estar centradas; ellas va a sufrir». En este sentido, Ängel Manzano alegó que seguramente los nervios aflorarán en el próximo partido. «La presión influirá sin duda, pero este el duodécimo partido que se decide por menos de ocho puntos; estamos acostumbrados a estas situaciones».

Sobrín alertó de la calidad rival: «El Rivas tiene una plantilla de calidad, no se puede permitir el lujo de jugar sin Serna o sin Davinia (pivot y ala pivot de gran peso en los momentos clave); será un partido duro porque ellas son grandes y tienen calidad». Sobrín aludió al peso del banquillo rival y lo comparó con el maltrecho estado del ibicenco. En cuanto a las claves del partido de ayer, Sobrín señaló como aspecto destacable que «sabiendo la tensión que tenía el encuentro, han sido capaces de aguantar todo el partido las seis jugadoras con las que he podido contar», indicó Sobrín en relación a los fallos en tiros libres del cuarto tiempo. Asimismo destacó el enorme trabajo de Boleda y trabajo defensivo sobre Silvia Hernández y Claudia Brassard que han quedado muy diluídas gracias a la combinación de ayudas que habíamos preparado».